domingo, 30 de abril de 2023

A la "ferre"

 

Bricovetustos abueletes

menudean en sus visitas

comprando “sprays” de pintura

para sus sillas favoritas.

 

Por una parte, independientes

e intrépidos de criterio,

no hacen cábalas solamente

en la inminencia del misterio

sino que al tiempo solicitan

opiniones fundamentadas

de esos expertos vendedores

y su ciencia cualificada       

que atienden la feligresía

(sábados y domingos inclusive)

de una cercana ferretería

que con rótulo “ad hoc” se exhibe.

 

Con indumentaria operaria

adquieren más y más “sprays”.

De hito en hito, los demás clientes

los observan y unánimemente

coinciden de forma plenaria

en que ese par de “luminarias”

son ya de lo que no hay.

viernes, 28 de abril de 2023

"Cocktails" y contraindicaciones

 

No suelen los galenos bendecir

el “cocktail” liberal que tiene efecto

si antibióticos mezclas con Martini;

que aunque de aperitivo va perfecto,

pudiera el tratamiento reducir

a un tamaño de “tratamiento mini”.

 

Las legiones gloriosas, las mesnadas

no dudan de tu firme valentía

ni de tu tiento en otras muchas cosas

con que la vida va y nos desafía.

De modo que mi encargo respetuoso

ni en olvido ni en displicente foso

caiga como caduca hoja en otoño.

Y, superado el trance nebuloso

que afectaba a tu vista,

sin otrosí ni riesgo puedas darte

a esa ingesta capaz ya de colmarte

en tu probada condición de artista.

miércoles, 26 de abril de 2023

Regresos

 

Aunque los lectores de este “blog” numerosos no sean, haberlos haylos que, con maneras de cortés generosidad, me honran gastando algo de su tiempo en atender estas líneas que escribo. A ellos he dado ya referencias de cómo el cinematógrafo es mi espectáculo favorito y de muy mayor y reiterada frecuentación.

Pues bien, cuando se nos confesó, desde este gobierno tramposo, que no cabía ya más disimulo y que teníamos la pandemia encima y extendiéndose; y a continuación fue obligatorio el uso de la “mascarilla”… resolví de inmediato no asistir al cine porque eso lo volvería insufrible.

Muy luego, eliminado el odioso adminículo para tal menester, y “slow learner” como sabemos por Knopfler, un resto de reparo, otro de inercia y otro de pereza me demoraron. Y ayer con gozo expectante he vuelto por donde solía, 3 años largos después, y claro que exactamente decidido por el reclamo de la enésima revisión que sobre los mosqueteros de A. Dumas se ha estrenado poco ha.

 

Con ese famoso libro de aventuras se han hecho “films” de diversa calidad, algunas veces con mirada ingenua, con candorosas interpretaciones, innecesarios tintes de dudoso gracejo, vestuarios de colorín y actores de muy variados rango y entidad. El presente supera quizá a todos y anula a algunos, aunque sÓlo (de solamente) retiene ciertos elementos básicos de la trama mientras reduce o añade, con inexplicable atrevimiento, otros que podrían calificarse de espurios y que pueden desconcertar o enfadar a los versados en el conocido argumento.

Con todo, la pátina del color en la fotografía, el desgaste natural en la ropa de los espadachines, con los amplios chambergos emplumados; la suciedad y el abigarramiento de las ciudades de la época, barro y lluvia incluidos, y por otra parte el majestuoso y solemne ambiente de los palacios y templos, el empaque y esplendor de los monarcas, la nobleza y el alto clero, etc. confieren a esta entrega una convincente y ancha verosimilitud.

Al atormentado personaje de Athos le imprime serio dramatismo Vincent Cassel, relevante actor, más y más en alza. Y a Milady, la recrea, insuperable, Eva Green, “medusa en el friso”, crisol perfecto de la belleza perversa.

Al final de la proyección un rótulo reza 2024, que insinúa o promete ulterior desarrollo. Veremos.  

sábado, 22 de abril de 2023

El ingreso al laberinto

 

comenzó cuando resolvimos poner en práctica la idea/IKEA de una cómoda o cajonera que contribuyese a desahogar un tanto los profusos y ya confusos armarios de la ropa.

Superada la visita a la macro tienda, tras dubitativas investigaciones por internete, y recuperada la orientación en el aparcamiento, las cajas del material estilo mecano cargadas convenientemente, arribamos a casa.

La marca, históricamente crió fama de someter a los incautos clientes a vicisitudes sin cuento que como selva inexpugnable de obstáculos brotaban de la errática prosodia y no menos errática sintaxis con las que los manuales de instrucciones para el montaje solían venir redactados. Justo es decir que en este caso dichas instrucciones han sido un ejemplo de método y acertada enumeración.

Así que Lady Taladro, instinto y visión de la jugada, ha culminado el laborioso periplo y el mueble queda erigido… produciéndose a continuación la necesidad de cambiar el emplazamiento de una mesita vecina sobre la que, “de toda la vida”, descansa el giradiscos marca LENCO, veterano y aguerrido invento para volver a escuchar los vinilos de la colección.

Y en esa encrucijada, los intrépidos del bricolaje discurren una plataforma o peana a medida, con sus correspondientes escuadras para instalar el “plato” con intención de que quede suspendido sobre el amplificador de turno. Y primero hay que descolgar un gran “póster” que ha decorado la pared correspondiente todos estos años.

Os haré merced de la descripción de la ronda por un establecimiento del ramo en pro de conseguir madera, pintura, barnices para, también, un sillón cuyo traslado al porche sucede dentro de esta misma redistribución del espacio… la adquisición preceptiva de un “nivel” que garantice la horizontalidad de la peana antedicha, tornillos y similares y algún que otro artilugio más, para la ocasión.

 

Arrebatados por el delirio, como dicen que el carro de fuego se llevó por los aires a Elías, profeta, estamos considerando la construcción osada y febril de una réplica del Monasterio del Escorial, aunque admitimos cierto componente de exageración en el propósito.  

jueves, 20 de abril de 2023

Sarna con gusto

 

Mintiendo escandalosamente, flotando en su burbuja de desentendimiento, acordando impasibles y con unanimidad sin fisuras los periódicos ajustes al alza de sus salarios funcionariales, los barandas de los 23 o 24 ministerios, profusamente acompañados de respectivos séquitos de asesores, secretarios y demás fauna preferente y parásita, se aferran a los cargos/enchufes sin un pestañeo, sin un instante de pudor, impermeables a los problemas y se ve que pasmaditos para discurrir la más endeble de las soluciones que corresponderían.

Sobre todos ellos, artífice máximo de los chanchullos (eufemismo de los gordos), Perro se vanagloria y extiende su sonrisa cínica, hipocritona, su regodeo al estilo Joker en “Batman”.

 

Y esta tarde, por televisión, Jesús Romero, agricultor sevillano, señala que el tomate, en el campo, se paga a 0’13 cts. en tanto cuesta en los supermercados 1’40 €. Pero no es eso, todavía, lo peor. La ruina completa será, ya es, la sequía.

Yo recuerdo un plan hidrológico que ya estaba en marcha, creo que con aprobaciones, cálculos financieros, ayuda de Europa, corríjanme si me falla la memoria. Y ZP el nefasto, y su cuadrilla a juego, decidieron que no, que les gustaban las desaladoras. ¿No fue así?

 

Pues nada, nenes, que se ve que estáis encantados con lo que hay. Seguid votando.     

martes, 18 de abril de 2023

Tardo en salir

 

El falso perdón que pides

con un retraso de meses

es la moneda tramposa

que te señala con creces.

 

¿Los DEFECTOS de esa ley,

EFECTOS indeseados?

¡Qué hipócrita y elusiva

es la fórmula elegida,

machacona y repetida,

para un “blanqueo” imposible

de cagada tan visible!

Soltar los violadores,

pederastas y agresores

sexuales

¿no era la clara burrada

de una ley mal redactada

que aún sigues sin corregir

(como el menor de los males,

Perro, sectario y falsario)

porque en tu cuadrilla infame

el único corolario

es que no hay que dimitir?

 

Veremos si los votantes

te piden estrecha cuenta

y “para la Navidad,

por eso y más cosas, más”,

te devuelven al corral

como desecho de tienta.

domingo, 16 de abril de 2023

Ya te digo yo que esto no es Irlanda





Así va la cosa

 

Pasarse tres, o más, pueblos trae consigo, tarde o temprano, que el malestar generado por ello termine en muy radicales desembocaduras. Que se lo digan, si no, a Julio César.

Así que cuando a particulares y/o empresas se les atosiga, otros dicen se les fríe, a impuestos, y las grandes cantidades de dinero detraídas se administran a lo loco, o peor, se derrochan en financiar propósitos indecentes y escandalosos trasiegos y corruptelas, un número indeterminado de dichos particulares y/o empresas se plantea salir huyendo hacia latitudes más consideradas y con menos manejos de extorsión mafiosa, de amenazas y de coacción. Y hay quien se traslada a Irlanda, por ejemplo, donde además disponen de un “wishkey” buenísimo.

Los comunistas y los hipócritas (que a menudo lo son por igual), en su clásico alarde de cinismo, se rasgan las vestiduras, chorreando invocaciones demagogas, travestidos en ninots de falla titiritera y trilera.

Así va la cosa.

viernes, 14 de abril de 2023

¡La madre que te parió!

 

Rancia y borde te mostraste

con lo de los camioneros.

En esa ocasión se vieron

tus modos atravesados,

tus malas pulgas “de serie”,

tus desplantes majaderos.

 

Desde entonces hasta acá

no has mejorado una mierda

y, chulángana de izquierdas,

cargando a lo bruto, ¿llamas

a Andalucía “esquinita”?

¿Siendo tú una gallinita

del corral del relamido

gallo de ese gallinero

que con “ministrAs” de cuota

tiene un gobierno zurcido

con ineptos y pelotas

y palmeros y floreros?

 

¡La madre que te parió!   

¿Qué educación te enseñaron

en la escuela?

Date un puntito en la boca,

no vayamos a pensar

que, encima, igual estás loca.

miércoles, 12 de abril de 2023

Cirugías

 

Noticias recurrentes de desaguisados “estéticos” ocurridos, o cometidos, en según qué clínicas.

Y claro que a cualquier persona le viene la idea de mejorar (o lo que lo parece) el aspecto físico, que el mental ya es harina de costal diferente. A veces por necesidad o por conveniencia; también porque la vanidad existe y porque lo que ahora conocemos como la “imagen” se ha ido volviendo más y más determinante.

La juventud o su apariencia se cotizan. Y de ahí el fenómeno de las numerosas personas que resuelven pasar por el quirófano (lagarto, lagarto) en pos de reparaciones y/o enmiendas.

No es turco todo lo que reluce. Así que un presupuesto u otro no dejan de tener posible influencia en los resultados.

Sobran antecedentes históricos, literarios, Dorian Gray y lo que se tercie. Y en todo caso, y antes que se vuelva querencia obsesiva, moda, droga sucedánea, no estaría mal algo de prudencia.

 

Que no te pase como a alguna figurona célebre que, de tanto recoserse y remendarse, ya parece la momia que grita; o la otra que nos va recordando, por orden cronológico, a FATS (“Magic” 1978), al JOKER (“Batman” 1989) o a BILLY (“Silencio desde el mal 2007”), por citar ejemplillos del cine. ¿Que no?

martes, 11 de abril de 2023

Sonidos de refresco

 

Sabemos que, en los racimos, las cerezas se enganchan entre sí y tiran unas de otras. Si no, ya me corregirán los frugívoros.

De forma parecida, de una sugerencia “made in” I. Cortázar, amigo histórico, nativo de ese Baracaldo, grato y cordial, ha partido mi curioseo personal sobre Richard Bona, intérprete de diversos instrumentos musicales, compositor de melodías felices y voz y talento a juego, que su biografía refiere y remarca desde su niñez en Camerún.

Con los resultados admirables de un carrerón múltiple y fecundo, con el modo cariñoso con el que trata a sus bajos de cinco cuerdas, este señor nos abre el oído a satisfacciones de refresco, demostrando una vez más la resplandeciente variedad del mundo, la belleza que pueden contener los sonidos del habla de pueblos que no conocemos y el largo milagro del lenguaje articulado.

Y desde ahí, dando otro paso azaroso, me veo entrando luego por “un jardín de senderos que se bifurcan” (como decía el ciego argentino genial) y yendo a dar con Charlotte Dipanda, con Hervé Nguebo, quienes refuerzan lo que hoy escribo y nos dejan en la certidumbre resignada, no hay otra, de que 1000 vidas se nos quedarían cortas. Vaya por Dios.       

lunes, 10 de abril de 2023

Dragó cae

 

Esto es lo que hay.

Con cada nueva baja, más insoslayable la evidencia.

Para quienes, hasta donde es posible, han/hemos seguido sus escritos como vía para conocerlo, la persona y su pensamiento, son indudables sus relieves: la pasión por la vida, las experiencias, la curiosidad inagotable por investigar asuntos diversos, el carácter polémico y la notable independencia, todo ello llevado de continuo a un límite que parecía no tenerlo.

Caudaloso crítico y conversador inteligente y devoto de la palabra, agotaba los desarrollos de cada tema que lo sedujo (filosofías exóticas, tauromaquia, política, el sin fin de resortes que pulsó); sabio de muchos saberes, hasta coqueto a sus horas, sus jóvenes y no tanto décadas de escaramuzas se asentaron y aseriaron en la profundidad de una madurez que ha coronado guapamente con ese mínimo apunte postrero con su gato, cuyo instinto quién sabe si presentía una despedida que era inmediata ya.

A este hombre ya no le estorbarán los ruidos. Eso también ha sido una buena muerte.     

sábado, 8 de abril de 2023

Dices tú de cambios...

 

De repente, como una avalancha, se nos vienen encima las noticias crecientes sobre la inteligencia artificial, laboriosamente incubada durante un tiempo de duración que desconocemos (ya se han encargado de ello) y que en muy recientes meses, o semanas, irrumpe en nuestras vidas con previsión y/o amenaza de cambiárnosla de urgencia y para mejor o peor, según los casos, que ya se verá.

Tal parece, desde luego, que siempre hubo cambios.

(Digresión: se viene extendiendo una desgraciada e incorrectísima costumbre de decir, y escribir, “hubieron” cambios. Corríjase con rigor este deleznable y cacofónico fenómeno: debe usarse el modo impersonal “hubo”, que no cabe aquí, por improcedente, una forzada y forzuda concordancia de número.)

Afirmo, pues, que los hubo. Lo que ha ido ocurriendo es la gigantesca velocidad y el desmesurado tamaño de los que ahora nos caen encima. Y que tienen pinta de sobrepasar las posibilidades de adaptación y la elasticidad, no infinita, incluso de los más dúctiles.

Así que habrá que preparase para una relativa extinción de quienes muy lejos andamos de la habilidad para y la afición por novedades y novelerías.

 

Ya ha sido cambio brutal (como ejemplo, si se quiere, menor) tener que escuchar, con notable violencia del ánimo, las procacidades sadopornos que dedican los del “rap” y el “reggaetón” a sus chicas preferidas, con la preocupante aceptación de éstas -y que dan idea de sus formas de sentir-, cuando de chavales nos alentaban al tierno romanticismo “María Elena”, “Ansiedad”, “Mona Lisa”, en la voz de viriles dulzura y sabiduría de Nat King Cole.

Dices tú de cambios…     

viernes, 7 de abril de 2023

OBREGÓN CIRCUS

 

En sesión continua.

Con sólo sustituir alguna que otra letra, quienes con cachondeíto (motivado, ¿eh?) te rebautizaban Antoñita la Fantástica, pueden ahora repetir la ocurrencia y transportar el tono -que es uso de canciones y música en general- para nombrarte hoy como Antoñita la Fantásmica.

Tu peripecia, tu trapisonda abunda en detalles que, en lenguaje llano, serían propios de alguien que no está del todo bien de la cabeza. Porque descontando tu notoria afición por la ficción, el teatro y el espectáculo en general, es fácil observar en esta danza nebulosas, delicados indicios de los cuales no es el menos llamativo destinar a “tu niña de importación” el mismo cuarto, que has conservado intacto (!) y pertenecía al mozo difunto. O la obstinada y manifestada identificación, la intención sustitutoria de que un clavo (sigue el lenguaje llano) saque otro clavo. Fueraparte de tu duelo, pendiente de digestión, tu bulliciosa lucha por el pixelado de fotos a menores queda ahora en nada; también en el aire, o ya lo demostrarás si procediere, esa última voluntad que has llevado a mandato inexcusable con plegarias y almíbares de una “mamitis” mucho más comprensible que presentable; y rematando la faena con pingües emolumentos para las cuentas corrientes que la especulación morbosa de los bustos parloteadores de la “tele”, etc. no dejará de manosear. Todo lo que, para tomárnoslo en serio, pudo (no digo debió, allá películas) ser más o menos sobrio, ha sido de traca.

Y ya de propina, por el momento, ese amago de eventual familia numerosa que insinúas; que más vale que sea una guardería y nunca una granja avícola.

En fin que ni el Papa Francisco, ni Berlusconi, con sendos pies en el estribo, ni Gengis Trump han podido con tu protagonismo.

Y la Semana Santa…. ¡qué calor, por favor!      

jueves, 6 de abril de 2023

Las líneas de flotación

 

Hago una pausa en la lectura

de este libro serio, exigente,

para descanso de la vista,

para sosiego de la mente,

porque me llaman la hermosura

de esta luna que tengo enfrente

y su lenta danza de artista

que inicia un mutis decadente.  

(En pocos minutos rebasa

la línea oscilante del toldo.

En calma y silencio la casa,

en un compás de espera: me amoldo.)

 

Desde el porche o en la ventana,

me demoro en el paso del Tiempo,

de unos momentos que van huyendo

de siete a ocho de la mañana.

 

Regreso al libro de Federico

(que no es Losantos, que no es Lorca:

es Nietzsche, este Federico.)  

miércoles, 5 de abril de 2023

Un alquimista en el fogón

 

No obstante carecer de lo que por lo general entendemos como un carácter marcadamente valeroso, de forma esporádica me acomete un impulso súbito de enfrentarme al Destino y me planteo unas patatas fritas “caseras”.

Esto implica pelarlas con antelación. Mi escepticismo, y también una cierta tendencia a no asumir sin más los convencionales estilos establecidos, me han llevado al desarrollo de mi propia técnica, que los detractores podrán esgrimir como fuego a discreción que contribuya a mi ya razonable descrédito.

Enumero aquí los pasos del, por otra parte, elemental aunque quizá poco clásico “método de pelar patatas contra las costumbres y leyes vigentes”:

1º.- Tabla de madera, de superficie intermedia, colocada horizontal sobre la encimera de la cocina.

2º.- Cuchillo manejable y de afilado reciente.

3º.- Patata: hay que posarla. Se trata de conseguir, dada su habitual forma irregular, un equilibrio para que permanezca en posición vertical, como piedra de Stonehenge. Para ello corto uno de los dos “culetes” (que son como decir el afelio y el perihelio de la órbita), y una vez en pie, procedo a cortar, en sentido vertical aproximado, tiras de la cáscara, perfilando luego los pequeños detalles no alcanzados en esa primera instancia.

4º.- El formato es a elegir: rodaja fina o de moderado grosor, a taquitos o del tipo “bastón”, de todos conocido.

5º.- Recipiente con agua para dos leves remojones de los fragmentos obtenidos. (Conservo esta recomendación de mi madre, que era partidaria de quitarles un poco el almidón. No tengo constancia científica.)

6º.- El resto ya es cosa de la sartén, del aceite de oliva virgen extra, etc.

 

-¿Sal “ad libitum”?

-Ciertamente.

-¿Lección magistral?

-Apenas.  

martes, 4 de abril de 2023

El pelo de la dehesa

 

Lo del otro día, Díaz,

fueron meras fotocopias.

El público que en la inopia

mantenéis adormilado

(con migajitas de tarta,

subvenciones, “ayuditas”

y sueldos devaluados)

parece que no se harta

y, a pesar de estar refrita,

te compra esa mercancía

trillada, caduca y fría.

 

En medio del festival,

cariátide comunista

armada de punta en blanco,

con tus dengues “feministas”,

tu “catecismo” ambiental,

tus quejas contra los bancos.

Calculando

repartir el presupuesto

entre colegas. El gesto

de triunfo mientras Belarra

y Montero se achicharran

en reconcentrada envidia

porque ahora vas de arquetipo

y “pa” modelo de Fidias:

un “pibón” que quita el hipo.

 

Una vuelta más de embustes

y, para los mismos cuentos,

¿todo ese acicalamiento

y tanto desbarajuste?

El emblema y la divisa,

el pelo de la dehesa

de tu banda,

Yolanda.