martes, 26 de diciembre de 2023

Un caliente batir de palmas

 

Motivaciones frecuentes, y a menudo justas, son en el cante la queja, la protesta, la reivindicación.

Con notas de valentía, de desafío puesto en razón; con sentidos instrumentos de cuerda que en tonalidad menor subrayan esas melancolías; con un contagioso y caliente batir de palmas; desdoblada en cantaora y guitarrista que, para más afirmarse, ha decidido que la hablada cadencia andaluza prevalezca sobre la ortografía en su apellido (Peláe), esta María muestra, en uno de esos “youtubes” del internete, cómo se planta cara y se habla claro, con arte y empuje, templando y mandando, reiterando ese estribillo guapo que nos lo dice todo: “Que vengan a por mí”.

Que a todos debiera aludirnos. Bravo, brava María.

lunes, 25 de diciembre de 2023

Antonio:

 

Claro que me extrañaba que tus leales y cotidianos “likes” hubieran desaparecido, lo que no era propio de tu voluntaria fidelidad y tu generosa cortesía con este “blog”.

Llegué a achacarlo a mis recientes deserciones como redactor, deriva que reconozco desorientadora y que entiendo ocasionada por un relativo cansancio (que lo dan la edad y los visos de que uno habla, escribe, en el desierto).

Y no era tal: hoy me llega la noticia de ese infarto, repentino y a traición (así son las cosas) que ha cancelado tu vida.

 

A tu hermano, a tu gente hago llegar desde aquí el sentimiento de una amistad que estaba pendiente de un encuentro personal y que ahora nos es ya negada.

domingo, 24 de diciembre de 2023

La cuestión capilar, al filo de la nochebuena

 

De entre las diferentes coqueterías que lo comprometieron y cuyo discreto disimulo obtuvo fracasos considerables, no es la menor la observancia (semilitúrgica) del pelo.

Fue atreviéndose a dejarlo crecer, amparado en los ejemplos que, como todos los de su generación, recibieran de una “nouvelle vague” francesa que pronto cedería su liderazgo al empuje estético/social que, actitudes incluidas, supusieron los jóvenes músicos ingleses y americanos del norte (del norte de Méjico y el sur de Canadá, situémonos).

Ayudó a ello la comprensión materna y la aceptación “a regañadientes en disminución” que la paciencia paterna concedió a tal símbolo de independencia en los criterios, a esa señal de rebeldía con minúsculas en su caso, que en los jóvenes se iba extendiendo en los 60 del XX. Pero de antes, ya andaba marcado por la fantasía y la estética heroica y convencional de los mosqueteros de Dumas, favoritos en la lista de sus mitos y lecturas.

En este año último, cuyos artificiales y tumultuosos fastos navideños vuelve a rehuir, un corte drástico e inédito, aventurero y temerario casi, y la posterior revisión de Maritere han arribado a una distribución capilar que matiza con notable éxito el desgaste inevitable, proporcionando un estilo entre Christopher Walken y Donald Sutherland, un corte, un aire, que deberá salvaguardar, en orden a los deseables equilibrios emocionales, que tan frágil consistencia vienen mostrando.      

viernes, 8 de diciembre de 2023

Un Napoleón que no sé qué decirte

 

-¿Y a Vuesa Merced no le parece que el “Napoleón” de Ridley se ha quedado en poco?

-Puede ser. Claro es que no presumiendo de especialistas ni mucho menos de críticos “enterados” (que son la peste), éstas serían meras opiniones de meros espectadores.

-Eso sí, aficionados con todas las letras.

-Y las músicas. Pero las expectativas levantadas por ese “film” eran altas y cabía tenerlas con los antecedentes de ese director. Y algo defraudadas sí que se han visto.

-Formalmente, pocos reproches queremos hacerle; pero no se entiende bien la escasa profundidad que se concede al carácter, a la psicología de tan relevantes personajes. Si no es que la intención era desacreditarlos como al descuido, dando alguna pinceladita más a sus inseguridades y vulgares torpezas, que debieron tenerlas, que a su empuje e innegable importancia histórica.

-Será por eso que Phoenix parece desperdiciado/desdibujado como actor, y eso que lo es, bien demostrado.

-¿En fin?

-Largometraje, y prueba para las asentaderas de los cinéfilos, que esperamos de Scott una posterior compensación. El talento, nadie lo pone en duda.

-¿Algo para terminar?

-María Antonieta en la guillotina. La plebe, siempre lo es, que embaucada, escarnece con desquite soez y derriba reyes para ir a peor con los que “buenos los harán”, casi siempre déspotas también aunque mucho más ordinarios.

-¡Guay!

sábado, 2 de diciembre de 2023

Continuación

 

-¿Y piensan que al paciente,

lego y profano y por demás sufriente,

la información del impreso que ayer

por aquí se glosaba

le resulta precisa, suficiente?

-¿Pues qué detalles, para Vuesa Merced,

servirían acaso de mejora?

-La mención del azúcar y la sal

que escandalosamente brilla por su ausencia;

el suponer con temeraria guasa

y discutible ciencia

que omitirá el paciente la mostaza

en la dieta ordenada; que el tabasco

así mismo continuará en su frasco

cual si fuese el peor de los venenos…

-Desconcertado estáis, no es para menos…

-Y ¿qué es eso de los “Líquidos claros”

que, en cambio, expresamente se autorizan?

¿Son agua de colonia, vino blanco?

¡Pardiez, que no es asunto que dé risa

impreso tan ambiguo y cojitranco!

viernes, 1 de diciembre de 2023

Desacuerdos

 

Como cualquier observador medianamente atento ya sabe, la RAE experimenta brotes ocasionales de bobaliconería, crisis de identidad y otras alteraciones del pulso, que la inducen a conceder carta de naturaleza a según qué expresiones y “palabros” que, en oleadas, nos invaden nuestra hermosa Lengua Española.

Algunos casos de esta decadencia poco perdonable (que tiene ribetes de pretensión “progre” de flexibilidad superflua y mal entendidas inclusiones “tolerantes”) llenan de rubor a las piedras.

Y claro es que si la Institución se desdora y da tan erráticos ejemplos, el impreso que debería orientarnos en la pre-colonoscopia resulta sobremanera contradictorio en su redacción, con una sintaxis confusa y difusa que, en suma, añade alarma a lo que será desarrollo del pintoresco trance.

Desde estas líneas azarosas, de cuya infinitesimal y aun improbable influencia este modestísimo autor es harto consciente, queremos empero alzar una al menos corchea de desacuerdo con tal proceder y con casi todo lo demás que acontece en estos tiempos de barbarie y tontería predominantes.