Dentro
de la variedad de entonaciones con las que se maneja el español de América, se
nos ha vuelto especialmente familiar un sonido cuya intensa difusión mucho debe
al discurso torrencial y desenvuelto que caracteriza a los naturales de la
Argentina.
Un
poco a bulto, que vana presunción sería ir de especialistas, y que allá mismo
proliferan acentos diferentes, la atenta, admirativa y frecuente escucha de Les
Luthiers, esos magos, nos produjo un efecto inesperado e involuntario, cuando
saliste, Santidad, elegido del cónclave correspondiente y el humo blanco.
Porque,
aun con tu sencilla y poco brillante palabra, por el tono, era inevitable
asociarte con la comicidad de ellos, y ese desconcierto dificultaba nuestro a
ti debido respeto de católicos, como aquí ya se comentó.
Que
no obsta para considerar lo comprometido de un cargo (al que no se llega porque
sí) que te mete, Santidad, a recibir a esta pájara ¿“indignada” de origen?, con
su charlatanería protestona y reivindicativa y su catecismo rojeras y demagogo,
cuya tediosa inspiración poco tendrá que ver con la del tuyo.
Conque
según te coja el cuerpo, haz como el Faraón de Camas, quien templaba y mandaba
o bien, con una faena de aliño, despachaba sin más a una res, tan desecho de
tienta.
Que
no otra cosa debe ser, cuando el dictadorcillo de Telecotilleos despliega su
plumaje de cotorrita servil para salir a defenderla.
¡¡Vuelves a tus fijaciones zurdas, querido maestro!! La ferrolana, más bien, deseada en tientas tiene una hoja de servicios que más de una "delfina" del amplio espectro político quisiera para si.Le aventuro un largo recorrido.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde Aluche,salud y suerte el día 22.