martes, 26 de septiembre de 2023

La zancadilla

 

Quien hizo la ley, hizo la trampa.

La consecuencia exacta de eso vimos todos otra vez en el Parlamento.

La ley electoral vigente, coladero malicioso y estúpido, permite y aun alienta que una alianza de perdedores ávidos de poder escamotee y arrebate a los votantes el resultado cabal de las elecciones.

Porque a Feijóo lo avalan:

-Las evidentes ruina y decadencia de una situación deteriorada, frutos de un pésimo gobierno.

-Los datos y las cifras, incluso oficiales, por más que, por costumbre, traen maquillaje disimulón de serie.

-La madurez y el aplomo en la tribuna, y una solvencia y experiencia gestora muy superior a lo que le presentaron, o ni siquiera eso, sus adversarios.

-Una metódica retranca gallega proverbial con la que esmaltó sus argumentos y su discurso y rebatió el de los que procuraron medirse con él. (El “presi en funciones” no se atrevió a exponerse a un seguro y merecido vapuleo: malo, pero no tonto, se sabe de una mediocridad sustancial que el mando y las marrullerías no le mejoran. Manso y resabiado, cobardeó en tablas.)

 

Pero la zancadilla a quien podría ayudar parece decidida de antemano. Así nos va, nenes.

1 comentario:

  1. Lamentablemente, así están las cosas en este país! Lo que es, sin duda, descorazonador, es la tendencia ya confirmada al mercadeo, la compraventa del poder por un punadito de votos de minorías que nos imponen su matraca insoportable gracias a la adicción al poder de este "jefecillo" que rige el destino de España

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