Revisando
“facebook, la red, el internete”, resulta
sorprendente la copiosa eclosión de
conversos que han manifestado su condolencia y acreditado su admiración de
seguidores de este artista, conocida la noticia de su muerte.
Ilustre
mutante dentro de la música popular de consumo, y visiblemente alejado de
algunos relamidos compatriotas suyos, explotadores sin misericordia del
pedestre y amontonado mocerío, no parece que en vida se hubiesen valorado tanto
sus méritos como emisor de melodías atípicas, estructuras y textos que se
diversificaban entre la ironía, el escepticismo, y la insólita experimentación
ilusionada, resortes y hallazgos de escaso tráfico en las sendas inertes de las
discográficas, en el embobamiento convencional y acorchado de la masa y en los
resabios de la crítica, tan a menudo ayuna de fundamento como sobrada de
insolente ímpetu manipulador.
Su
propia imagen (la recóndita posibilidad de que fuera un extraterrestre
infiltrado), sus puestas en escena y el aura general de su trayectoria de perro
verde, tentado de surrealismos y metafísicas, lo calificarían de un caso
singular en contraste con las más adocenadas corrientes de la banalidad.
De
manera que convendrá aplaudir el reconocimiento de que la rareza y la
independencia puntúan, tanto si haya sido como si no a toro pasado, ése que
también hasta el rabo lo es completamente.
No
se espera, en la Eurovisión que esta noche nos aquejará, muestra alguna que
asociarse pueda con el estilo de este Franco. RIP.
De acuerdo contigo aunque supongo que sabrás que Battiato participó en el Festival de Eurovisión en 1984. No sería mal detalle que le rindiesen un buen homenaje esta noche.
ResponderEliminar