Podrías haberlo hecho
bastante mejor.
Pero con lo mucho peor que lo hizo el desastroso
metepata que te precedió, casi deberíamos estarte agradecidos. Aunque ni los
registradores pasmados de la propiedad ni los chirigoteros andrajosos ni los
tramposos de la perversión separatista son lo que la pobrecita España merecería
para su gobierno.
En todo caso, es tal el empeño rencoroso de tus
enemigos, tan venenosa su mala fe, que previsiblemente sumarán sus
mezquindades, soberbias, ansias, para echarte del podio, para escamotearte la
batuta.
Y no les va a importar (ya ha pasado antes) sembrar
el mapa de desmadres, despilfarros, ruina; ni hundir las señales que ya hay de
esta costosísima recuperación que omiten o niegan con las bocazas rebosantes de
mentiras.
Son una plaga: de polillas o de lo que sea. Pero
casi seguro que te van a joder, ya lo verás.
Y, si sólo fuera por ti, igual era la factura por
las cuatro o cinco cosas esenciales que te has dejado en el tintero, ya te lo
digo. Pero van a echar a perder el esfuerzo tremendo que hemos hecho estos
cuatro años. Y nos van a volver a dejar hecha unos zorros toda la barraca. Como
dice la Almendrita, “un sin Dios”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario