viernes, 21 de junio de 2024

Una ocurrencia primorosa

 

En más de una ocasión el Hipocampo ha aludido en estos renglones al Paseo Marítimo de la playa de Chiclana de la Frontera.

Paseo Marítimo. No parece que nadie lo haya llamado de otra manera, al menos en los 34 (¡vaya!) años que hemos venido recorriéndolo con relativa frecuencia para simular que uno hace ejercicio físico.

Y este verano, los forasteros, mesnadas numerosísimas, “tós” con teléfono móvil, encontrarán el añadido rótulo caprichoso, por lo repentino e inédito, donde consta un cambio de nombre que, misterioso modo, lo rebautiza algo ambiciosamente como Bulevar de la Música.

De pocos meses acá; aderezado con dos buenas figuras ornamentales: la una, versión metálica de Paco de Lucía inclinado a la guitarra; la otra, es una escultura que representa de cuerpo entero a Rancapino, “cantaor” flamenco de aquí, señero vecino popularísimo de esta tierra.

La iniciativa (edil o así, arrebatada inspiración, antojo o lo que fuere) no es del todo arbitraria ni era tampoco indispensable. Sólo causa una desazón incrédula la colocación del nombre, ese fragmentado, silábicamente descompuesto

RAN

CAPI

NO.

¿De verdad no vieron otra disposición mejor para que siguiera cabiendo en el pedestal correspondiente pero lo leyésemos en horizontal, sin que parezca un mensaje de tartajas?

¿Hay una conspiración contra los usos del sentido común, de la estética y armonía elementales, de los equilibrios no imposibles?                        

1 comentario:

  1. Querido Maestro: El cambio de nombre es todo un guiño al juglar de El Sargo. ¡Ojalá que en Madrid tuviéramos avenidas con nombre tan saludable!. Un ejemplo: Con motivo de la muerte de Aute ,abril de 2.020, la Consejera de Cultura salió en todos los medios anunciando "una plaquita" como homenaje al cantautor...... hasta ahora.
    Salud y suerte te deseo desde Aluche.

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