viernes, 27 de noviembre de 2020

Como todos hemos visto

 

no más para darte pisto

y volverte un mar de males

-porque para más no vales-

al sillón te has retrepado

por medio de una chapuza.

Y aunque solo no podías,

no ha faltado la gentuza

que te apoya cada día

en tu ambición y tu antojo.

 

Dan sonrojo

tus cínicos gorgoritos,

tus embustes inauditos

y el pedernal de tu cara.

Cual importuno esperpento

no tienes conocimiento;

conque para ver qué pasa

habrá que mandarte a casa,

en algún momento, al Tío

de la Vara.

No hay comentarios:

Publicar un comentario