lunes, 30 de septiembre de 2019

Ya se imaginan Uds. aquello a lo que me refiero

Ni los propios actores, ni Lelouch que vuelve a dirigirlos, seguramente pensaron que retomarían, tantas décadas después, el hilo de aquella historia que destacó entonces como muestra de amores frustrados.
Envuelta en una música cuya sofisticada facilidad, algo empalagosa, estalló en éxito de rutinarias multitudes, la "peli" precursora señaló una época en la que todavía el cine no había llegado a nuestras cotas contemporáneas de escarmiento, y resultó un ejemplo de melancolías memorables, romanticismo francés residual y elegantes acabados.
Tales ingredientes (el deliberado rastro de ellos) permanecen ahora con logros notables que, intercalando escenas de archivo, dan curso a un desarrollo verosímil en el que Anouk está más de inmediato reconocible que Jean-Louis, ambos extraordinarios de solvencia y oficio, la inclusión de la Bellucci, bastante sin venir a cuento, los guiños eficaces a los cambios numerosísimos que han modificado nuestras vidas, la añoranza del Alpine y el Dos Caballos (de la mítica evocación de la velocidad con la que asoma el miedo en la secuencia del amanecer por las calles de París), la misteriosa magia con la que el sueño y la realidad pueden entrefundirse a ráfagas de la memoria y el arte mayor de las palabras emocionantes que quedan insertas en los poemas recobrados.
El gesto que atusa, como antes, la melena de ella, la expresión de ausencia intermitente de él, de verdad que no son detalles menores, mientras se sale de la sala de proyección con, de nuevo, los rumores afilados del Tiempo que suenan para todos nosotros y un espejismo de imposible esperanza.   

sábado, 28 de septiembre de 2019

Mano maestra

No cabe discutir que la simpática aquiescencia y el decidido y voluntarioso favoritismo del guionista influyen considerablemente en los resultados; y queda meridianamente clara la colaboración estrecha y firme entre su aportación y el trabajo del actor (Stallone) sin cuya catadura y veteranía muy otras consecuencias nos veríamos constreñidos a extraer.
Y que dicha veteranía no es fundamento único de lo que sostenemos se hace patente si imaginamos, por ejemplo, a otro curtido intérprete como Sacristán, José, que tiende más a dar el tipo "cara de acelga" y seguramente no habría salido con bien en el empeño de encarnar al Rambo que aquí se comenta hoy, flanqueado por una actriz sevillana y un actor con apellido de calle, también sevillana (¡).
V y nuevo episodio de las andanzas aguerridas del ex-combatiente, "Last blood" (o sea, ¿Última sangre?) se ciñe a un argumento directo y esquemático para dar pie a una de las drásticas "soluciones ejemplares" del personaje mítico y heroico, medicado ya por mor de achaques que los años nos van aportando a todos, pero todavía eficacísimo en la preparación de mortales y fulminantes apaños artesanos que eliminarán a la cuadrilla criminal de los enemigos, reservando al cabecilla para un final no lejano del que le tocó en suerte a San Sebastián, mártir.
Mano maestra para una justa venganza.

viernes, 27 de septiembre de 2019

Debut con picadores

Declamando con cierto apresuramiento alguno de sus propósitos a medio cocer, el reciente aterrizado paladín se sometía, en el ruedo del desmesurado manoteador de la Sexta (¿la Secta?), a la novelería frivolona de los "analistas" de turno, ansiosos de sonsacarle cualquier detalle útil para iluminar la rutinaria mediocridad de las preguntas.
De unas preguntas que se caracterizan por ir precedidas de prolijos y farragosos exordios que en vano alardean de "centrar" cualquier aspecto de la cuestión que se trate, aunque apenas sirven para dejar en evidencia la plúmbea condición y el embotado relieve de esa cuadrilla de desnortados presuntuosos que las formulan.
Curiosamente, el entrevistado, mientras aparentaba escuchar, manuscribía con frenesí notas, en un estilo que acaso conserva mucho de los apuntes de la Facultad y que daba a entender una extraordinaria (o simulada) y virtuosa capacidad de bifurcar la concentración.
O sea, todos a cojear de sus respectivos pies.

-- ¿Te refieres al edificante espectáculo de la televisión que llaman "Al rojo vivo"?
-- Tal cual, tú.
-- ¿Y qué te ha parecido el señorín interviniente?
-- Como dicen en los toros (repásate el Cossío), "tardo en salir y de escasa presencia".
-- ¿Esperaremos por si un hervor le faltase?
-- Por cortesía, y por paciencia, que no quede.

jueves, 26 de septiembre de 2019

Con lo malo que está el trabajo

Tontines de remota y aun imposible utilidad parecen los "enviados especiales", los corresponsalitos que (agencias de noticias, emisoras de televisión, etc.) nos repiten, antes, después o en medio, el comentario del suceso que sea, como si no fuéramos capaces de entenderlo de una sola vez, alargando con profundo patetismo la glosa, abrumados de pedestre terminología, rellenando sin necesidad visible cualquier improbable hueco de la información/desinformación correspondiente.

¿Qué pasa? ¿Eso "viste", da relieve, profesionalismo? ¿Añade lujo, aparente inversión financiera? ¿Hace crecer la codiciada "audiencia", de suyo aborregadita?
No sé si papanatas o papagayos, qué tristes y superfluos quedan al desarrollar tan anodinos simulacros.

-- Si ya sabemos que el trabajo está muy malo...
-- Y que "picar piedras en una cantera" sería peor.  

miércoles, 25 de septiembre de 2019

Desunidas podemos & Co.

Zancadilla va, cainita quijada de burro viene, de aquel idilio de aula y sarampión bolchevique no era imposible que, andando el tiempo, los colegas experimentasen diferentes modales y se disfrazaran con desiguales atuendos en el compartido y heroico destino de reformadores a fondo de nuestra sociedad, a la que hay que rescatar de su naufragio ideológico y funcional, como ya hemos visto que consiguieron sus iluminados precursores en Cuba y otras latitudes, asaz dichosas.
Trasunto desgarrado, como los descendidos de Sierra Maestra, con toda la pinta (y la niña y la santamaría) hirsuta y pendenciera que todo revolucionario que se precie debe exhibir a lo largo de los siglos, jefe o macho alfa ¿indiscutido e indiscutible? que "si te opones a mí, te defenestro". El uno.
El otro: aire absorto y seudodespistado de eterno intelectualito estudioso, "no quiero asustaros, porque no he roto un plato" aunque desde fuera, "fíate -- o ríete -- tú de las aguas mansas" y de paso, "¿qué se habría creído ése?, ¡se va a enterar de lo que vale un peine!".

La centrífuga pandilla asamblearia, que los secundó no hace tanto, dirime una confusión múltiple de denominaciones de origen y se apresta a elegir profeta o, alternativamente, irse atomizando en irrelevantes, aunque presuntuosas, corrientes de enfrentados y ridículos protagonismos.

martes, 24 de septiembre de 2019

La continuación de las buenas costumbres

Seguramente desconcertados por la abrupta desaparición del árbol que a algunos debía servir de cobijo; omitido, durante varios días, el gratuito "servicio de desayuno" que los aquerenció, hoy los pájaros tardaban en decidirse a remontar desconfianzas y a aprovechar los trocitos geométricos de pan que vuelvo a dejarles sobre las baldosas del jardín.
Permanezco inmóvil, dentro del porche, sentado en el "sillón del observador", esperando. Al cabo, van atreviéndose, ensayando con cautela vuelos rasantes de reconocimiento, como de tanteo, explorando las posibilidades de hipotéticas trampas que (pero ellos no lo saben) no existen.
Y después, poco a poco, 5, 6, 7 de ellos, sin renunciar del todo a la prudencia, dándose ejemplo unos a otros, y que "a buen hambre, ni duro que fuese lo habría", van aterrizando y disfrutando de esta variedad de maná, discontinuo y providencial, con el que seguimos haciéndonos, diferentes y todo, buenos amigos. 

lunes, 23 de septiembre de 2019

La nostalgia del futuro

Con un antojo de más clásico y mejor estilo, le han dejado el título, no en el inglés machacón de tantas veces, sino en el latín sagrado que ojalá recuperásemos como universal "lingua franca".
"Ad Astra" discurre así entre la música serena de su banda sonora y la majestuosa belleza en las imágenes que fingen el espacio omnipresente en el argumento, la actuación de Brad en el personaje que encarna, pleno de metódica sobriedad reflexiva, de convencida predestinación y entrega, y los apoyos siempre maduros y sabios de Tommy Lee y Sutherland, causando en el espectador la admiración y la nostalgia del futuro que no alcanzaremos, la conmovedora melancolía en la distante aparición femenina y humana de Liv y un aura de heroísmo en el empeño decidido de investigar, de conocer y descubrir, ese fino y poderoso hilo que ensarta las hazañas inconcebibles de Alejandro, de Magallanes y de tantos otros gigantes para la eternidad.

Y por cierto, me da que algunos moteros querríamos una línea de cascos que algo se inspirasen en el que usa el astronauta del "film". Pónganse a ello los conspicuos diseñadores.

domingo, 22 de septiembre de 2019

Trenes y tiovivos

Vuelve a lucir la barba merovingia
que a rachas lo acompaña por la vida
y que con relativa displicencia
y cierto esmero cuida.
Para el tedio que implica la tarea
suele poner el canto gregoriano
en el pequeño equipo del salón
que es el que más o menos queda a mano.

¿Sorprenderá a los nuevos inquilinos
de la casa de al lado
este sonido, sacro y matutino,
esta música de los antepasados?

La lluvia que ahora cae,
que por suerte ya no es la de Orihuela,
de la reciente tala lo distrae
ante el jardín, a la luz de una vela.

(El Tiempo y sus vaivenes,
la rueda giratoria, el tiovivo
de los postreros ciclos, de los trenes
que no han de llegar nunca hasta Canfranc.)

-- Elegíaco estás, contemplativo
en el sólito modo.
-- Y astronauta vicario con Brad Pitt:
ya ves que esta mañana habrá de todo. 

sábado, 21 de septiembre de 2019

Nuestro estandarte

Con el poniente que tomó el relevo,
estos días atrás,
hoy ondea de nuevo
siguiéndole el compás
la enseña de la R solitaria,
que no es usurpadora ni corsaria
y que desistirá del usufructo
del mástil de la esquina en la terraza
cuando regresen por aquí sus ojos
de color de melaza.

-- ¿Estás seguro de que el daltonismo
no te engaña otra vez, en esta hora?
¿De que es ése el color
que brilla en la mirada de "tu amor"?
-- La duda abrumadora que señala
tu inoportuno y cauto rigorismo
no supone una escala
dodecafónica ni discordante
ni es digresión, ni un estorbo intercala
en "Mi Propósito Mío" de antes.
Conque permíteme seguir mi canto
y alabar sus encantos
(sus caderas, sus bucles y su risa)
y así, por retornar se dará prisa
y en este simulado baluarte
colocaré otra vez nuestro estandarte.

viernes, 20 de septiembre de 2019

El chollo

La decisión de un juez te da permiso
para asistir a un centro (¡y en Pozuelo!)
que hará más llevadero el compromiso
que te cayó por ser tan bribonzuelo.

Tu variopinta lista de delitos
no ha sido óbice ni cortapisa
para que, con mostrarte algo contrito,
bajes del coche con una sonrisa.
Y como eres famoso, te esperaban
con ansia los inquietos reporteros,
con la sumisa estupidez esclava
de la televisión de sumidero.

Compadecidos del aislamiento
que estás sufriendo en tu prisión selecta,
han arbitrado para tu contento
una fórmula leve e indirecta;
y, aunque sólo dos veces por semana,
una excursión para pintar la mona
será tu paripé de filigrana
con que salir un poco de chirona.

¡Tremendo chollo, Urdanga,
la insólita dulzura de ese juez
que tan finas puntillas
lleva cosidas en las bocamangas!

jueves, 19 de septiembre de 2019

Cine horroroso

La insólita e innecesariamente larga duración de "It: capítulo 2" no hace otra cosa que agravar su gratuidad y sus presuntas y confusas raíces psicológicas y existenciales, la acumulación de fotogramas y escenas que deberían espeluznarnos, si no reiterasen el desfile de monstruos grandes o pequeños, el payaso maligno y cabronazo, imaginados y/o surgidos de otros tantos que caracterizan al género, y todo eso mientras se supone que ha debido haber una primera parte que situaría al desprevenido espectador en cierto nivel de comprensión o aceptación resignada del caótico argumento.
En todo caso, la disparatada pesadilla se va trivializando en los decorados del sobrante tramo final de la "peli" (en el inframundo de espantos de la desvencijada y siniestra casa) y, más que remontar, termina por agotarnos con obviedades y chorraditas, a pesar de la inclusión en el reparto de algún que otro figurón con más importantes antecedentes.
Al menos, me dio tiempo de pasar por Mercadona, antes de que cerraran. 

martes, 17 de septiembre de 2019

Más de lo mismo

¿Y nunca dirán "ya basta"
los sufridos españoles
al dineral que se gasta
en parásitos políticos?
¿No estamos "hartos de coles",
de debates analíticos,
de líderes inservibles
y democracia "jartible"?

Los insípidos gloriosos,
los egoístas berrendos,
estos falsos y tramposos
que piden nuestro refrendo:
¿no habrá quien la mande al paro
a esta pandilla de golfos,
forajidos,
a ejercitar su descaro
en el más profundo olvido?

domingo, 15 de septiembre de 2019

En el aire de nuestra habitación

Hay veces que, después de los amores,
en el aire de nuestra habitación
queda un silencio grande.

Y un poquillo después,
se siente el pasar leve
de la pregunta muda e interior:
Esta vida, ¿hasta cuándo?

Y al poco,
y porque tu cabeza suele estar 
reclinada en mi hombro
y el vello de mi torso
hace por tu nariz cierta cosquilla,
te la frotas igual que una chiquilla.

sábado, 14 de septiembre de 2019

La petición

El "Coletas", con la jeta,
¿va a pedirle al Rey que medie?
Pero Pablito, tesoro,
¿no eras republicanote?
Y en medio de tus rabietas,
¿no te parece un desdoro
venirle con ese lloro
a Felipe, que Dios guarde?
Haciéndote el carajote,
como te desprecia Sánchez
y la cosa está que arde,
¿pretendes que el Rey se manche
con la pringue y los manejos
de tu chalaneo viejo?

¡Pero si eras comunista
de la guardia más añeja!
¡Si tu vitola castrista
no consintió ni al habano
la Corona!
¿Y andas pintando la mona,
solicitando el respaldo
para tus planes de saldo?

Decir "altura de miras"
es el moco que se tiran,
como tú, los caraduras.
Y hay tantos hijos de fruta
que al final añoraremos
la Monarquía Absoluta.

viernes, 13 de septiembre de 2019

El espectador

Un helicóptero patrulla
a baja altura sobre la playa.
Lo observo desde este acuario
que otras veces es atalaya.
Y al mismo tiempo, en el jardín,
como el reflejo de un espejo,
las libélulas hacen sin fin
el remolino de sus cortejos

Ocioso y contemplativo,
me entretienen estos matices
hoy, que estoy poco reflexivo.

-- No te creo, pero ¿qué me dices?
-- Que el mar en calma da sus brillos
y silencios ocasionales
y, ahora en septiembre, ya los grillos
urden sus ritos teatrales;
y a los sensuales frotamientos
de sus élitros encrespados
no los enmudece el viento
en sus reclamos enamorados.

-- ¿Nada que hacer?¡Qué vida llevas!
-- ¿Y te parece que estas rimas
no me ponen bastante a prueba?
¿Que la fantasía y sus esgrimas
no son un globo que se eleva?
-- Hipocampo, estás en la Luna.
-- Y ella es la Dama que me quiere,
blanca y suave. ¡Qué fortuna! 



jueves, 12 de septiembre de 2019

Al memo en funciones

Un "pacto de perdedores"
te colocó en el sillón
y ahora la soldadura
que prolonga esa postura
es tu sola caradura.

Permaneces
haciendo el tonto con creces.
Empachoso, las más veces,
traidorzuelo, las restantes;
y las veinticuatro horas
del día, desesperante
tu obstinación trepadora.

Tu anhelo
y tu estúpida porfía
alargando esta agonía
de investidura fallida
es el farsante camelo
del que pierde la partida
y con romper la baraja
pretende que todo encaja.

Eres puro aburrimiento,
tío. "¿Por qué no te callas
y ojalá, cuando te vayas,
te vayas a tomar viento?

miércoles, 11 de septiembre de 2019

El ficus en el jardín

Conozco tu origen, como que casi eres contemporáneo de Irene.
Así que durante cerca de treinta años (que se dice pronto) te he observado crecer, volverte más y más alto y frondoso, resistir con valentía al viento, que algún año fue más fuerte de lo que hubiésemos querido. Y aun así, ahí sigues, respondiendo a mis sobrios, pero insistentes, cuidados, al ritmo sostenido del riego y poco más.
Acompañándome, y creo que como yo a ti.
Y no me siento bien cuando ahora te miro, sabiendo que en pocos días voy a decidir tu tala, y sigo regándote como si no fuera a suceder, con un ánimo trufado de tristeza y traición.
Porque sólo respondiste a tu naturaleza, generando un previsible entramado de raíces que trastornarán la casa si no te lo impido. Y estarás (o no) conmigo que hasta ahí no podemos llegar.
Con Manolo Jardinero ya tenemos fecha para la semana próxima.
Pero, oye, me gustaría...: ¿tú crees que habrá una "nube" donde reunirnos cuando yo, también, me acabe?

martes, 10 de septiembre de 2019

Cuatro horas después

¿Hechos a imagen y semejanza de Dios?: no es posible. Porque entre Sus Infinitas Perfecciones cabría la habilidad para el escarmiento. Y no es nuestro caso.
Así que como otrora creo haberos relatado la experiencia inefable que supuso el montaje de una estantería para la cocina, hoy arduamente reconozco que de nuevo nos hemos dejado seducir por la tentación demoníaca y estamos inmersos en la primera fase del bricolaje imprescindible para la construcción e instalación de un mueble donde guardaremos los zapatos que no entran en el anterior.
-- Eso se llama zapatero.
-- No quería ni formular esa palabra, ni mencionar el nombre maldito del infausto "sansirolé" que hace años nos hizo la vida tan imposible.
-- Prosigue, pues.
La primera impresión al desembalar las piezas de la estructura fue su complejidad y lo laberíntico del mapa que había de guiar nuestros pasos o precipitarnos al abismo de la desolación. Descripción y dibujos, viñetas numeradas, etc. parecían abstraerse como los más ignotos pergaminos, infestados de una enigmática escritura que los arqueólogos pretendieran descifrar en vano, tal era su remota y arcana condición.
De forma insidiosa, el "legajo de instrucciones" aseguraba con pérfida hipocresía y afilado sarcasmo que la operación duraría una hora, con el concurso de una sola persona para su desarrollo...

Cuatro horas después (y omito los pormenores), la destreza de Lady Taladro y el apoyo en ocasiones errático aunque pleno de inocencia y buenas intenciones fallidas del Hipocampo, dan cima a la aventura, con la satisfacción del objetivo alcanzado, del final, aunque agotador, resueltamente victorioso. 

domingo, 8 de septiembre de 2019

"Objetivo: Washington D.C."

Como tantas "pelis" de acción (aun superando a varias de ellas, y reiterando la hipótesis de una conspiración que eliminaría al presidente USA y daría pretexto para otro "gran negocio de las armas") ésta se nutre de posibilidades, nada inverosímiles, antes bien, harto reales según nos ha demostrado la Historia y aunque no suelen servirnos ni de enseñanza ni de escarmiento.
Así que la trama avanza con desenvoltura, los efectos son logradísimos e impresionante en su eficacia el muestrario de instrumentos bélicos con que los buenos y los malos, difíciles de precisar a veces, se machacan a conciencia, así como las escenas de incendios, deflagraciones y colapsos de edificios, etc.
Lo que ya no es frecuente, sino una estremecedora y honda escena que removerá los sentimientos y el lagrimal de cualquier padre, es la que protagoniza con singular ( y contenida y expresiva, al mismo tiempo) maestría Nick Nolte, en el papel de veterano combatiente, sabio de decepciones, acorazado de independientes y resistentes filosofías, de áspero y seco sentido del humor y con todo, tan capaz como el que más de la abnegación y la ternura con las personas que quiere.
En esos primeros planos ya hay toda una lección de cine.

viernes, 6 de septiembre de 2019

A buenas horas

Miradlos subirse al carro del oportunismo: los mediocres, los pedorros, los piernas; los adictos a la carroña de la murmuración; los idiotas casuales y los que miraban para otro lado antes, desentendidos, y ahora, urgentes, se ponen al día con unción farisea, con trilladas frases convenientes; con lamentos de plañidera tardía.
Los oficiosos, los "enterados", los expertos repentinos, descubridores in extremis de la cáscara boba del vocabulario que más creen que corresponde a la actualidad de esa celebridad -- bastante olvidada, recobrada de golpe con el atropellamiento de lo inesperado -- que acaba de morir hace poco y que, vaya por Dios, zarandean ahora, con afectos verdaderos o ficticios, porque sirve de cebo para (tan sólo por algunos días) entretener al público y rellenar el vacío cutre de los programas de la televisión, esa escuela de horteradas y supercherías.
A buenas horas, mangas verdes.  

jueves, 5 de septiembre de 2019

De nuestra agencia de noticias

Los medios de comunicación, tan fervorosos siempre con las noticias de máximo morbo como espuela de las audiencias, con profusos comentarios y reportajes se han hecho eco de un suceso reciente y rural que pone de manifiesto las tensiones ideológicas y la colorista variedad de las corrientes contemporáneas de opinión que afectan y van modificando nuestro pensamiento, nuestros usos y costumbres, reformando en sus más hondas raíces la sociedad y los códigos morales, capitaneados por las vanguardias de la intelectualidad y de la moda, por el inquieto y combativo estilo de colectivos filigraneros & so on.

En el cuartelillo de la autoridad competente, ha interpuesto denuncia una gallina ponedora (cuya identidad salvaguardaremos con respeto y sumisa obediencia a la altiva ley de protección de datos) por asalto a su honestidad e intento de violación perpetrados por un atrevido y calenturiento gallo, durante las fiestas de la localidad de Fuentedisparates del Río, que se celebraban a la sazón.
Llamado a declarar el imputado, manifiesta su intención de demandar a la gallina por un supuesto delito de fraude o estafa, toda vez que, establecidos los atisbos, pormenores y movimientos de aproximación que corresponderían a una previa intimidad, la gallina resultó ser otro macho disfrazado (algunas versiones dan por hecha una condición transexual o travestida) que naturalmente impidió con firmeza cualquier escarceo, no importando que el carácter de la intentona fuese abusivo o persuasivo, forzado o dócil y blandamente cortés.
En la actualidad, los jueces están estudiando el expediente para, en su día, emitir el apropiado fallo de esta relevante causa.

miércoles, 4 de septiembre de 2019

Una pregunta

Un único operario multiusos
se ocupa de diversos menesteres
en esta "caracola" frente al mar;
y aunque abunda en métodos confusos
y no es sintético ni minucioso,
no suele impacientarse y es modoso, 
y con mis cuitas y mis misereres
dócilmente se sabe acomodar.

Imprudente, la mañana presente
lo convoqué temprano y descuidando
del desayuno la ritual usanza,
sin advertir lo que la Ley de Murphy
traslada del lasciate ogni speranza.
Y así, con sobresaltos neuróticos,
leyendo de uno en otro pentagrama,
le abrí la puerta; trasegué el café,
omití el fruto seco; y las tostadas 
que, matinales, pautan el programa,
de milagro salváronse del frío
con el tenaz levante de este estío.

No me siento ecuménico;
tampoco cosmogónico.
Y, al no ser nada ubicuo,
la simultaneidad me torna agónico...
Terminado el encargo, me pregunto
por qué promuevo a veces, de repente
tan cuestionable cruce en los horarios:
¿me desordenan ya mis contrapuntos,
de una manera asaz improcedente,
mis largos, numerosos calendarios?

martes, 3 de septiembre de 2019

¿Cuánta y qué clase de buena cara cabe ponerle al mal tiempo?

Ciertos familiares y allegados de la deportista famosa actualmente desaparecida, responden con caras sonrientes (!) a las preguntas mediocres, rutinarias y reiterativas de los acuciosos reporteros, incluso de los que parecen husmeadores de miserias ajenas.
Pocos días atrás, reunidos los cargos públicos más correspondientes de las autonomías para, se supone, decidir cómo solucionar la reciente y vigente intoxicación, posan para esa tontería que llaman "foto de familia", como si la cuestión no fuera con ellos, con distendidas y también sonrientes expresiones.

Unos y otros, unas y otras, ¿a tanto ha llegado la estupidez y la inconsecuencia, la prioridad voluntariosa de "quedar simpáticos en la tele"?

De otras escenas similares, de otras situaciones de parecido jaez, he sido espectador. ¿No son acaso bastante graves los asuntos que conciernen a estas gentecillas como para adoptar una cara diferente, una, digamos, al menos, de circunstancias?   

lunes, 2 de septiembre de 2019

Arduas deliberaciones

han precedido a la decisión final, al "ukase" que ha determinado la sustitución del veterano frigorífico (tocado ya por dilatado y valiente servicio) por otro cuya adquisición hemos sometido a prolijas investigaciones y comparaciones, a lo largo y ancho del vertiginoso e infinito tablero de opciones que Internete/Némesis ofrece a los temerarios y sobrecogidos consumidores que se atreven a deslizarse por sus simas como Dante hiciera en su infierno legendario y literario.

Somos conscientes de las dudas suscitadas; de los titubeantes pasos que se han dado, incluso en divergentes y aun contradictorias direcciones, antes del momento culminante en el que -- algo más que agotados y "hasta la corcha" de análisis ponderativos -- hemos procedido al telón final que cierra (aquí cruzamos los dedos) el conflictivo y bizarro periplo.
Como una añagaza interplanetaria, mañana esperamos el aterrizaje de la máquina. Todavía se especula con las alternativas de las que se revestirá la ceremonia de su botadura, en tanto confiamos a la Misericordia Divina el gradual restablecimiento de las conexiones neurológicas, que han sufrido lo suyo.

domingo, 1 de septiembre de 2019

Aquella fantasía oriental

Durante años procuré encontrar por las perfumerías el mágico frasquito lobulado que, al parecer, había dejado de fabricarse con la desidia clásica que hace a los mercaderes desentendidos de nuestros recuerdos, de nuestras más tiernas tradiciones y nostalgias.
Y ahora, por algún movimiento que han debido detectar (porque sólo los guía el interés crematístico, como decían los de la editorial de aquella compañía de discos), vuelven a programarlo y aunque la distribución todavía deja que desear, a través del infinito laberinto de nuestros días que es la agotadora RED, la Almendrita lo ha localizado para mí, en gestión casi inmediata.
Llega en menos de dos días y reproduce con fidelidad el formato y los detalles, la estética original de cuando entonces, para que recobremos, mamá, una oleada de sensaciones nunca olvidadas por lejanas, una victoriosa vuelta simbólica a ese pasado del que sólo los insensibles reniegan.
Con deciros que incluso, como antes, flota en el líquido (ámbar claro, casi de whisky) la maderita que a aquella fantasía oriental daba su nombre, ornado de luna y de cúpulas y minaretes...