domingo, 27 de enero de 2019

Finalmente

No ha sido un abandono sino una
duradera avería en este puente
que de modo precario, intermitente,
"cibernético" y poco consecuente,
se tiende hasta vosotros de mi luna.
Que no es la de Valencia, y ahora veo
que aunque no tengo mucha simpatía
por enredos de la tecnología,
no es mal parche, los ratos que no leo.

De forma cautelosa, pruebo ahora
a retomar, desentrenado, el paso.
Lamento, de estas líneas, el retraso
y espero que otra vez merecedoras
se muestren de la vuestra comprensión.
De todo corazón
el Hipocampo, un tanto sedentario,
insiste en la pasión
y el ajedrez de los vocabularios. 

2 comentarios: