domingo, 31 de enero de 2021

Cuando la zorra "defiende" el gallinero

 

Pasándose el Supremo por el forro y aprovechándose (cuándo no) de las grietas que ofrecen nuestras leyes en su desbarajuste, los tramposos encargados de la sucursal catalana han sacado del presidio a los espantajos del separatismo, a los delincuentes sediciosos, para que amenicen con sus arengas de delirio vociferante las próximas verbenas electorales, en cuyo río revuelto medran sin miramientos los peores pescadores del sistema.

Que el espectáculo ya no sorprenda, con tanto dislate al que quieren resignarnos los mandamases, con sus insistentes pasadas de esponja mental, puede ser; ahora que, como lo del KARMA no sea otro timo, tarde o temprano este presente de bochorno, este manicomio envenenado pasarán factura rigurosísima.

Hay personas que todavía confían en ello.

A pesar de estos tiempos en que prima la conjura --más que de los necios, de los mierdosos--, la consigna criminal de echarlo todo a perder.                                                       

sábado, 30 de enero de 2021

Manta y sofá

 

En las pausas de este “tiempo consumido en nada”, de todo nos llega  por la “tele”.

Cualquier cosa. Algún lugar de Almería, en el que van dando por perdida irremisiblemente una encina que ya sucumbe a los achaques inherentes a sus mil trescientos (o así) años de existencia.

 

Deben ser cosas de la edad, este instantáneo conmoverse por una pequeña noticia, náufraga en el torrente furioso de los líos cotidianos.

-Igual, gajes del simbolismo, lo que vamos interiorizando; o la ternura que van posando los años en lo que fue (o sólo lo fingía) aquella “roca que nunca llora”; lo de la armadura, etc.

-O este repertorio de las borrascas bautizadas, ya te digo.

-Quita, quita.                                                      

jueves, 28 de enero de 2021

Los términos de la proposición

 

-No están claros.

-¿No será porque el lenguaje más técnico sería incomprensible para el vulgo, para la relativa ignorancia lega de los no iniciados?

-Ni aun así. Por lo pronto, ya suena a recochineo despectivo o, como poco, irrespetuosillo, lo de la “inmunidad de rebaño”. Mucho cacareo con lo de los Derechos Humanos pero en lo que está el “rebaño” es en la inseguridad y en la incredulidad enormísimas.

-Las “fake news” y la madre que las parió…

-Que son las mentiras gordas de toda la vida. Con la añadidura de su número creciente y de la gigantesca difusión que las azuza desde los medios de “información”, manipuladores unos y otros por el interés de cada cual.

-Y encima el “internete”.

-Ya. Y que hasta la palabra vacuna parece que no corresponde con cabal propiedad a lo que ya acumula sombras y maniobras en la oscuridad. A la fórmula que urgía y que acaso, por la insólita rapidez de su desarrollo, se está terminando de ensayar sobre la marcha, con visos de “panacea pero menos”. Y como si no existiesen precedentes de otras cositas que evidenciaron – pero después – las funestas consecuencias que incluían.

-Y eso que no hay prospecto que no señale las contraindicaciones y los efectos secundarios. Que, por cierto, ¿alguien se ha leído el que viene con lo que ahora andan inyectando?

-A ver si resulta que con lo de la sobreexplotación y paradójicamente la escasez de recursos esa que dicen que hay, lo que sobra es gente. Y lo que falta es decencia.

-Lagarto, lagarto.                                                  

miércoles, 27 de enero de 2021

Bailable

 

Con su talante, calmo y discretito,

de rositas se va Salvadorilla.

De nada se arrepiente. Maravilla

que ahora que es su hora

de abandonar el barco que zozobra

(que es conducta convencional de rata),

no considere que quizás no sobra

mostrarse algo contrito

por tantas veces que metió la pata.

 

La muestra de que son impermeables

al pudor y a otra suerte de virtudes

es su ductilidad de intercambiables:

de su maceta saca el “jefe” a Iceta

y, en ese desplazar de los peones,

le coloca otro enchufe de repuesto

con cargo, como siempre, al Presupuesto.

¡Qué baile de bufones!

¡Qué modo de comprar las adhesiones!

domingo, 24 de enero de 2021

Mucho que corregir

 

Que no todo son excelencias -ni mucho menos- en la cosa esa del mundo global en el que, de hoz y coz, tal parece que estamos abocados a ser incluidos, sumergidos: por él, devorados.

Si es nuestro sino, nuestro futuro ya presente, inevitable, ello será, nos guste o no. Ahora bien, habrá que pechar de camino con la revisión y la asunción de multitud de casos. Y así,

¿escándalo gordo, porque jóvenes especialistas en los pingües manejos del paradigma de lo global que es el “internete”, con los astronómicos dividendos que su habilidad extrae del bolsillo de los borreguitos…

(consumidores de las fantasías de los nuevos espejismos, de las espectaculares drogas virtuales de la masificación, trivial y embrutecedora, a base de fórmulas de evasión y abstracción de nuevo cuño)

… porque esos “youtubers” digo, salen huyendo, procuran poner sus ganancias a salvo de la satánica voracidad fiscal de los Estados?

Y en este planeta de pícaros (qué ingenuo queda el Lazarillo de Tormes), ¿con qué ejemplos limpios de las conciencias y las conductas, con qué autoridad moral se les tachará de egoístas insolidarios, desde los púlpitos de la hipocresía convencional que, al mismo tiempo, produce sin descanso políticos infames, frescos ilimitados, corruptos multicolor y multiculturales, estafadores, malversadores, prevaricadores, derrochadores; una sociedad que consiente y aun alienta esa realidad clásica y caduca de “ismos” ideológicos enfrentados, de dinero a raudales malgastado en la existencia y la persistencia financiada de los individuos y las mafias que, sin dificultad, todos tenemos en mente?

Mucho que callar y mucho que corregir antes de ponerse a tirar la primera piedra.  

sábado, 23 de enero de 2021

"La abuelita"

 

Va para un año (un año entero, y lo que te rondaré, morena) que, cuando tu cara empezaba a hacerse famosa saliendo por televisión, aquí en casa te pusimos el sobrenombre de “la abuelita”.

¿Por tu vocecita cascada, por el alboroto del pelo como de acabarte de levantar de la cama y apenas con descuido negligente pasarte el peine, por los ojillos de mirar indeciso o lo siguiente?

El caso es que, a medida que lo tenebroso de la situación fue yendo a más, la broma se nos fue echando a perder enseguida, defraudados espectadores de esas explicaciones trufadas de mentiras, contradicciones, renuncios, temeraria ignorancia o redomada desfachatez, ingredientes posibles de tu receta personal.

Y ahora sigues ahí, colocado, “sostenido y no enmendado”, faltaría más, por tus colegas superiores, encargándote todavía (lo que es otra muestra más de lo que hay) de contarnos unos cuentos tan increíbles ya como tú mismo.

Después de las casuales camisitas para el calor del verano pasado, lo tuyo es ese formalismo modosito y encantador de los jerseys algo deportivos, corregidos con el detalle clerical de cuello y puñitos de camisa asomando escrupulosamente, en esa medida exacta y preceptiva que tanto defendía Manolito Varela, entre otros jugadores a dandismo alternativo de los 60/70.

Caperucitas rojas (sólo en el color) desencantadas, nos preguntamos qué sueldo suculento te pagarán por ser, por seguir siendo, uno de los fantoches del pim, pam, pum, figura.                                                 

martes, 19 de enero de 2021

A mejor vida

 

-¿Ya te ha llegado la noticia por el internete?

-Tú dirás.

-Phil Spector, muerto.

-Vaya.

-Venga, ¿lo soltarás? A ti no te gustan las vacas sagradas.

-Es que no veo la necesidad de sacralizar a las vacas. Pero…

-Pues como nombre de prestigio y fama en las décadas más gloriosas del XX…

-Y figurón, no digo que no. Para eso estaban la industria del disco, la época de las vacas (otra vez) gordas y también el contagiado embobamiento proverbial entre las masas aficionadas con escaso criterio.

-Así que según tú…

-Bastante más ruido que nueces. Impresionar al personal a base de tenebrosas toneladas de instrumentos, ecos a troche y moche y poco más, sea fácil o difícil, no me parece digno de tantos laureles. Luego se vio que de la cabeza tampoco andaba muy bien. Y como todo se pega, podría nombrarte a más de uno de los nuestros que pretendió imitarlo con parecidas hipérboles y que tampoco iba la cosa más allá de cierta confusión: lo del culo con las témporas, aplicado a la música popular de consumo.

-¿Como por ejemplo?

-Pregunta en Tele5: allí anidan los mejores chivatos de todos los despropósitos.                                                 

lunes, 18 de enero de 2021

Despelote

 

Por mucho empeño que los numerosísimos hipócritas, interesados venales, y también algunos ingenuos hayan puesto en su formulación y sostén, estaba más que cantado:

El Estado de las Autonomías, ese eufemismo teatral, es, con sus iniciales mayúsculas, un mayúsculo y fracasador invento que ahora, con nuestras agotadoras tormentas perfectas (la nieve, la pandemia, la ruina económica, etc.) lleva una larga temporada poniéndose más que nunca de inocultable manifiesto.

Y la falsaria “cogobernanza” que los caraduras quieren vendernos es sólo un despelote de tales proporciones que cada día que pasa nos aproxima a una quiebra definitiva o a un abismo. Vale que habrá más palabras “ad hoc”; pero lo gordo está en que ni con la resignación de la inercia ni con los disimulos dolosos saldremos de esta agonía imperdonable.

jueves, 14 de enero de 2021

Una cuestión de tiempo

 

Porque un Castelló, primo hermano y padrino mío, fue pieza esencial en la fundación de Radio Vida de Sevilla, escuché yo, de niño, referencias y elogios que merecían ya las labores de información sobre cine, música, deportes, etc. que unos mozos iniciaban en la época y la relativa vanguardia, curiosamente auspiciada por los Padres Jesuítas en la calle Trajano, de mi ciudad de entonces.

Entre otros, Carlos Gortari, Manuel Alonso Vicedo, Alfonso Eduardo Pérez Orozco, resonancia de lejanos, indirectos casi mentores que acercaban las novedades a mis disponibles y aprendices oídos de chaval, y todavía asoman a esta memoria.

En los archivos de la Radio y la Televisión abundan los ejemplos de una sabiduría, una trayectoria y un oficio con los que Alfonso Eduardo ha muerto, pocos días atrás.

A mi regreso de Bogotá, alguna vez nos entrevistamos y estuvo atento y respetuoso con el trovador en ciernes que fui en los años 70, y que procuraba hacer camino al andar por los Madriles.

De haber lo que algunos dicen que hay, tendremos ocasión para un siguiente saludo. Es apenas una cuestión de tiempo.                                              

miércoles, 13 de enero de 2021

Convendría saber

 

quiénes son los responsables del criminal y sostenido expolio que contra el consumidor perpetran con las tarifas eléctricas.

Convendría saber qué mecanismos, qué “legalidades” canallas consienten y aun fomentan ese incesante abuso.

Convendría hacer un listado nítido y completo de todo eso. Para que marrullerías sucesivas no destiñan la memoria. Y porque no debemos perder la esperanza de que algún día también a ellos se les pase la que será justificada factura, implacable y rigurosísima.                                            

martes, 12 de enero de 2021

Algo tienes

 

Aunque embobados, vándalos y horteras

no hayan faltado a sus comportamientos;

y porque al mismo tiempo, los momentos

de conducta ejemplar son numerosos…

… considera este OSO

(más bien polar, atendiendo a sus canas)

que ha sido un privilegio,

todas estas mañanas,

verte ese porte señorial y regio

que te ha envuelto de insólita manera:

tus avenidas, parques y jardines,

tus palacios de heladas vidrieras

han sido un sueño, una imagen de cine.

 

Problemas, claro; y los que siempre tienes.

Mas el año que viene

y los demás, echaremos de menos

este semblante elegante y sereno,

la mágica ilusión, la borrachera

de tu hermosura de blanca bandera,

Madrid.                                            

miércoles, 6 de enero de 2021

Apaga

 

Grave lo de USA.

Porque para el mundo es un país de referencia y que, a pesar de la antipatía que parece despertar entre sus quizá envidiosos detractores, viene sirviendo de ejemplo en más de cuatro cosas.

Las imágenes por la “tele”, típicas de otras latitudes, eran hasta ahora poco menos que impensables allí. Pero a todo se llega cuando se va dejando hervir el caldero de la decepción, la frustración, el desencanto y finalmente el cabreo de las ciudadanías (todas) ante el fracaso calamitoso que evidencian las democracias con sus hipocresías, sus chanchullos, y su corrupción y sus entelequias de imposible cumplimiento.

La gente está harta de los políticos, especialistas en enredar mientras mantienen el chollo de sus sillones y se les va el tiempo y la cháchara en debates con frecuencia inútiles que no resuelven los problemas pendientes.

Así que si no se reforma con rigor la estructura, si no se limpia a fondo y de forma duradera el patio, toda esta decadencia se irá a la mierda. Y con motivo.                                            

martes, 5 de enero de 2021

Gibraltar,

 

cagadita tras cagadita.

¿De verdad no puede hacerse otra cosa con ese nido de delincuentes?

Para sustituir la hipoteca de los puestos de trabajo que de ahí se derivan (migajas de una tarta envenenada y humillante), ¿nadie decide un plan que fomente la economía, la industrialización, lo que sea, para cortar esa interminable sumisión, esa otra mancha en Andalucía?

Con tanto presupuesto para otros asuntos, ¿qué?                                            

lunes, 4 de enero de 2021

Jornadas inaugurales

 

Hoy me planteo un desafío.

Un propósito que, desbordando con clara temeridad los límites de mis posibilidades para la aventura (que nunca fueron una cosa que “pa” qué), me ofrezca una síntesis entre dos símbolos, de la tradición y de la modernidad, respectivamente.

De paso, incurriré con ese acto valiente en una tangible interrupción de la rutina que los modosos hábitos, la respetabilidad de los años y el frío que pela han hecho crecer en estas jornadas inaugurales del 2021.

A la tradición dará forma (y espero que aceptable) la tortilla de patatas que con arrojo inaudito voy a pergeñar, tras largos años de aplazamientos y meditación, y recordando los ensayos atrevidos que para Irene acometí en el pasado.

El tributo a la modernidad encontrará su símbolo correspondiente en el nuevo vuelvetortillas (acero inoxidable) que admirablemente surten, desde el previo encargo “on line”, los amazones y amazonas de vespa o furgoneta que asoman, trayendo el pedido, por la trasera valla del jardín.

Alea jacta est.                                            

domingo, 3 de enero de 2021

Multiusos

 

Vale que han sido numerosos los casos. Y ahora se nos da un ejemplo más de cómo nuestros jefes y jefecillos lo mismo valen para un fregado que para un barrido; que podría ser que fuesen buenos para nada.

Así que de ministro de sanidad (cargo del que saldrá más que aureolado de indecisiones, renuncios, ambigüedades, cuando no de “trolas” más propias de Internete) lo van a presentar como cabeza de lista de la sucursal catalana de la PSOE.

Habrá que ver el papelito que hace, con sus apagadas maneras que ahora dicen “de perfil bajo” o, con eufemismo de pasarela, “conciliadoras” (a las maneras me refiero). Contraste sí que va a suponer con los bailecitos del quemado Iceta, a quien seguro que buscarán un chollo de acomodo que le compense la larga espera en frustración resuelta.

Salvadorilla, tierno diminutivo. Quintero, León y Quiroga, con sus coplas de arreglos de dunas de Arabia que tan propias de estilo abundaban en intervalos de segunda aumentada, podrían haber adaptado para Manolo Caracol la letra de “Salvaora”, pasándola a Petenera, mujer a la que no supo ponerle nombre el que lo hizo, ya que perdición de los hombres habría sido más justo apelativo.

Como fuere, ya se le verá el manejo a este, en apariencia, sosegado multiusos.                                            

viernes, 1 de enero de 2021

1 de enero

 

Ahí están, las incógnitas.

Toda la gente, a lo que va a pasar, para este año que comienza. Unos, esperanzados; otros, escépticos; ninguno sin un relentillo (o gravísimo repelús, según el caso) de desconfianza, en manos de quienes está el pandero.

Si no de truenos, no dejará de traer la caja (que no es de las de latón y delicias que dan fundamentado prestigio a “La Despensa de Palacio”) asuntos que han de sorprendernos, en el margen de ello que nos queda. En el entremientras…

Esta pasada noche, vino con lluvia el viento que, entre sueños, me hace llegar el rumor de giro de la veleta; el mismo viento que le va abriendo desgarraduras de heroísmo de ficción a la bandera inventada que dejo ondear y que Maritere restaura cada cierto tiempo, echándole paciente consideración a ese mi antojo de navegante de secano canoso.

-Sí, no te falta más que darte al retruécano, como Cabrera Infante.

-No ha sido más que una aliteración menor. Prosigo.

Como inaugurando con entusiasmo “el calendario que no tengo” todavía, en tropel ha venido a desayunar la dotación de pájaros del jardín los trocitos del pan matinal/cotidiano, ese rito que, en la distancia, ojalá siga compartiendo con nosotros tu María. Un abrazo, don Manuel.