La
“colega” en el sillón
de
Ministro de Trabajo,
¿no
tiene otra oKupación
que
el desvarío a destajo?
¿Qué
disolvente le mana
de
la inane neurona
que
el cacumen le empantana
y,
hecha una cantamañanas,
anda
pintando la mona?
¿Esa
“matria” disonante
se
le ha ocurrido a ella sola
como
la farsa atorrante
de
una estudiante ignorante
que,
un viernes de borrachera,
se
agarra de una farola?
Si
persiste en la “finura”
de
ese discurso de andrajos,
que
es de su genio y figura,
quizá
resulte adecuado,
ante
sus desaguisados,
un
repaso de estropajo.
¡Muy atinado, maestro Rodrigo!
ResponderEliminarQuerido Maestro: Quizá ya has elegido tu nueva fijación para tus desaforados comentarios. La desafortunada expresión ya la habíamos leído en Unamuno y a tu querido Borges, bueno, una licencia mas. Con todo prefiero para esa cartera a la inigualable cum laude en derecho laboral, a la manchega y su tesis "simulación de indemnización en diferido".
ResponderEliminarA 38º a la sombra desde Aluche, un fuerte abrazo.