Yo supongo que una republicanota como tú y además con
menos años, creo, de los que tengo a cuestas, no ha de molestarse por el tuteo,
quizá confianzudo aunque siempre respetuoso y progresista.
Figura frecuente en la televisión, acuciante y ansiosa,
calurosa y combativa cual una vestal roja de la barricada, enarbolando una de
esas banderas más o menos revolucionarias, después de ser diputada en las
Cortes españolas: así te veo, con mi daltonismo y todo.
Me imagino que serás más cosas que desconozco. Y claro
que mis adjetivos son de libre elección; igual que los tuyos de anoche,
pretendiendo en vano separar a Ortega Lara hombre (y admirable) de Ortega Lara
miembro (y respetable) de ese VOX que, si camina con ventura, te puede poner
las peras rebeldes al cuarto.
Casi querías abrasar a Merlos con tu resuello típico de
caldera en ebullición.
Y qué temibles deben ser tus sofocos cuando tienes que
sacar el pasaporte español en la aduana de turno.
Aunque lo que más de ti me mola, Rahola, es el “fino” sentido
del humor que evidenciaste en tu roce con Bertín, con quien te unen tantas
diferencias.
En Chiclana de la Frontera están las bodegas del “Sanatorio”.
Pásate un día, anda.
La Rahola es de un país donde los extremistas radicales como ella utilizan sus sentimientos y pretenden manipular los de todos los demas, utilizan sus sentimientos para refregarlos por donde sea, para arrojarlos contra quien sea y los vomitarlos sin cesar, pues si los radicales tambien tienen sentimientos, vealo usted.
ResponderEliminarMe ha gustado eso de ponerla las "peras"...tratándose de la dama? Raola. Que pillín.
ResponderEliminarQué sutileza la tuya, compañero. Mira que haberte dado cuenta del fino sentido del humor de la dama...!!!
ResponderEliminarUn abrazo