y
desbocadas carreritas por los pasillos de esa Unión Europea que no consigue ser
mucho más que el mercado común de intereses materiales que siempre ha sido.
La
“progresía” estalla en chillidos de “dragqueen” porque el húngaro legisla lo
que a ella no le gusta.
Consideraciones:
1.-Partiendo
del hecho de que los políticos que nos manipulan (un país con otro) rarísima
vez pasan del nivel de basura, ellos y sus ideologías demagogas, cualquier
padre (o madre, o “progenitor”, como los idiotas pretenden que sea la “nomenklatura”
oficial y obligatoria de su pensamiento único), cualquier padre, digo, con “dos
deos de frente” preferirá orientar a sus hijos en materia tan delicada y decisiva
como el sexo y las conductas a él anexas, antes que poner a los chicos en las manos,
sucias con frecuencia, del equipo sectario en el poder: del que hay y del que
venga, no hago distingos.
2.-La
educación es tan fundamental como la deseducación tendenciosa es siempre
perversa. Cuidado con eso.
3.-El
argumento de la conveniencia, de la bondad, de que la enseñanza abra las mentes
a todas las posibilidades y opciones, es tramposo si no se añaden por igual el
conocimiento y la enseñanza de otras realidades: ¿la poligamia, por ejemplo?
4.-Alguna
otra cosita: si vamos a setas, Josechu, si vamos a mayorías, que se lo cuenten
a los SOLAMENTE 2 millones de quejosos que el separatismo catalán ha sembrado,
contra los 45 millones de españoles que faltan por tener en cuenta, acuérdate,
falso “valiente” del sillón, mindundi máximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario