Las tinieblas de la conciencia

Ante la realidad de que la cartelera de hoy en las matinales revestía escasísimo relieve, liándonos un poco la manta a la cabeza, hemos optado por la más reciente y vigente entrega de esa reiteración que, años atrás, ya comenzaron a designar con el título de "Fast & furious" (que con relativa aproximación podríamos acaso traducir como "Rápido y furibundo").

Descartada su radical ausencia de profundidad, que las apariencias engañan también es cierto; y así, como espectáculo resulta sobresaliente y aunque las bromas entre los protagonistas son elementales, alguna risa conceden al espectador y podemos decir que este film queda como una aceptable muestra de cine para familias, con unos inesperados instantes de ternura y la impresionante hermosura de angelito exótico de la joven que interpreta el papel de hija de uno de los brutos.

Vale que por más que el oído engañe y un rasgar de papeles coincida con pasos que lo atribuyan a detritus en suela de zapatilla, o bien que el sonido de una tijera de cocina corte cierto plástico con lo que parece insistencia de encendedor...

... no está la conciencia tan desviada ni tan desvaída como para desconocer...

-- ¿A dónde va a llevarnos esto?

-- ¡Que te crees que yo lo sé!