jueves, 30 de noviembre de 2017

Porque hay cosas que no se arreglan con palabras. Y aun así...

-- Anoche no te decidiste. ¿Y hoy?
-- Hoy, cariño y respeto. Y silencio; ya habrá ocasión...
-- No estés tan seguro...
-- Desde luego.

Pero hoy sigue la duda. En fin, adelante.
Expresiones hay para casi todo. "Se agolpan los recuerdos."
Los de casi medio siglo (¡qué vértigo!) de nuestra vida.
Con la cordialidad a toda prueba de los camaradas, te fuimos diciendo Lucerito, Capitán Purillo, Rey de la Palanca (de vibrato, en la guitarra eléctrica)... Cuando te llamaba por teléfono, o cuando nos encontrábamos con el medio abrazo circunspecto del saludo entre hombres de respeto, yo te nombraba Antonio, y una de mis absurdas neuronas me hacía pensar que era nombre de romano antiguo; o de peluquero, como habría dicho mi viejo profesor de francés, aquel Mr. Déjean que iba a dar las clases en San Francisco de Paula, montado en su bicicleta.
Tú más sobrio y yo más excesivo, coincidimos en mucho de lo fundamental. Fueraparte, nuestras bromas recíprocas eran sobre tu "sonido callejón" y mi adscripción a la lealtad del "chorus". Nuestros cotilleos, sobre figurones de la música y su industria, cuyo análisis reiterado y zumbón volvía una y otra vez, tántas fueron, entre comilonas y tertulias de sobremesa. Conservadores de pensamiento, confidentes sobre aventuras románticas verdaderas o soñadas, todo un rumbo discontinuo pero firme, desde las "galas" con los Pekenikes...
De estas últimas temporadas, el propósito permanente de volver a esos microsurcos, que ahora ya, frustrado, me produce un arrepentimiento impotente e inútil.
Lo sé, nos vamos yendo y cada vez, quién lo diría, el trance nos toma más a traición que por sorpresa: así de avestruces somos, de trapos que insisten en borrar los trazos de tiza de nuestras endebles pizarras.
Así de imbéciles "héroes" en un incorregible desastre, en un único, inevitable y garantizado naufragio.
¿Me avisarás si hay algún sitio luego, un pentagrama más para juntarnos?

-- Anoche, ni una lágrima. ¿Y hoy?
-- Hoy, al final de estas líneas, me estoy desquitando. ¿Qué otra cosa, si no?     

miércoles, 29 de noviembre de 2017

Plañideras, arbitristas y otras subespecies

Mucho ruido desprenden las consecuencias del pintoresco amago republicanito de estos tiempos.
Y claro es que en ocasiones las víctimas y los victimistas (justos y pecadores) pueden confundirse y confundirnos, aunque como ya deberíamos ser mayorcitos...
Así que lo del boicot a los productos de alli, cabe y cabrá esperarlo cada vez que los comportamientos generen unas antipatías que luego pasarán la natural factura. Y de acuerdo en que los jaleos los arman los políticos; pero la "mayoría" que los nombra y la otra mayoría que no lo impide no pueden sacudirse el delicado compromiso y la aplastante responsabilidad "a escote".
Por ahí, buceando entre esas aguas "turbumables", evolucionan los bailarines tipo Iceta que, para caer pasablemente bien a casi todos (o eso se cree él, pobrecito), y por si lo dejaran llevarse el gato al agua, va lanzando desatinadas sondas provocadoras de un asombroso "perdón de deuda" que da la medida de su desenvoltura de memo "cum laude" y de su desvanecido e inquieto estado mental. 

martes, 28 de noviembre de 2017

A Pionono, en la distancia aunque en la cercanía

No sólo en opinión de tu Doctora
que al ser Santa debe tener razón
(y que Alá ilumine en cada hora
cada criterio de su corazón):
también el Hipocampo va y te exhorta
a que jamás tu hábito abandones
que ya sabemos cuánto reconforta
un dry Martini ante las sediciones.

Y mientras contemplamos de hito en hito
la danza del fantasma catalán
que, abochornando al seny acostumbrado,
con majaderos modos corcovados
emite plebiscitos inauditos
y bufidos de burdo orangután,
BRINDA A LAS VEINTE TREINTA cada día,
que, en Collado Villalba o por aquí
(en esta luminosa Andalucía),
varado en las arenas gaditanas,
el estro nuestro afirme su otrosí
enhiesto como un palo de mesana.

lunes, 27 de noviembre de 2017

De película de terror

Fermentado en la frustración de tus rabietas, en el incesante vómito de tus canalladas y mentiras, era de esperar que (tal cual has hecho) recomendaras a tus otrora cómplices inmolarse aceptando con gozo el presidio, en la actitud opuesta a la tuya, capitán araña.
Esto, mientras que sigues zanganeando por Flandes y así, y seguramente poniéndote ciego de chocolates, etc.
Y no es que el ridículo que vas haciendo sea fácil de superar, au contraire, mon ami. Pero lo cansino, lo torpe, lo impresentable es la intención tóxica y el contagio que pretendes, que quizá sería menor si la imprudente frivolidad de los medios de comunicación y deformación no se cebaran tanto en la novelería, rancia ya, de las extraterrestres provocaciones que esmaltan tu discurso, en la ramplona "actualidad" de tus exabruptos de muñeco/payaso de ordinaria película de terror.

domingo, 26 de noviembre de 2017

Monsieur Poirot y sus filigranas

Como la añoranza es libre, ya se echa de ver en la recreación de esos ferrocarriles de lujo maravilloso que fueron exponente notorio de una época que cultivaba la belleza, en vez de la mera funcionalidad que, socializando que es gerundio, ha terminado por marcar con adocenamiento y vulgaridades feístas nuestras décadas más recientes.
Así, las imágenes del Expreso de Oriente-Coches Cama, etc. son una gozada y el asesinato resulta lo de menos, sobre todo si, como es de esperar/temer, en las logorreas que pretenden explicar los abstrusos vericuetos argumentales de los relatos de doña Ágatha, se pierde el hilo en cualquier punto, bajo la presión agotadora de las deducciones, implicaciones y conclusiones del detective de los mostachos extraordinarios, meticuloso y tiquis-miquis a sus horas y tirando a pedantón con relativa carita de bueno, el resto del tiempo.
Banda sonora con pasajes de lucimiento y reparto de figuras del cine para esta versión y revisión de la célebre aventura, con hermosos fotogramas, paisajes y exquisitos miramientos de tradición elitista y elegante para unos privilegiados y afortunados viajeros.

sábado, 25 de noviembre de 2017

Alto contraste

Para esta Navidad que se aproxima y que con tanta fruición adelantan los entusiasmados y ansiosos centros comerciales, la inefable y vetusta alcaldesa de la Villa y Corte, en conciliábulo judeocristiano con sus más ocurrentes adláteres, ha resuelto que el descomunal rebaño de la ciudadanía mansamente ordene sus evoluciones (que van siendo, con la masificación, tumultuosas en sus andanzas y frenesíes de consumidores compulsivos) y discurra con cierta obediente globalización de autómatas por una calle de ida y otra, de vuelta.
Y precisamente porque nos cuesta olvidar por completo el carácter castizo que otrora manifestaran los madrileños en los tiempos de Esquilache, ¿es de esperar que ahora al "aire de fiesta, los chicos y chicas" y los más talluditos también, sean dóciles a tal propuesta de imaginativo diseño? ¿Habrá un "aire de mesta"? ¿Los cachazudos agentes de la autoridad municipal darán de sí para enredilar a los descarriados, los desorientados, los meros rebeldes con más o menos causa?

En ALTO CONTRASTE (mantelería con las servilletas cambiadas, de otro color), con este veroño que andan diciendo por ahí, la mayoría de los locales de restauración, ocio y esparcimiento de estas playas de Chiclana de la Frontera ha cerrado por vacaciones y porque, bendito sea Dios, fuera de temporada descansamos en un remanso serenísimo de reconfortante desolación.  

viernes, 24 de noviembre de 2017

"Oro"

A partir de uno de esos frecuentes emperres más o menos heroicos que suelen caracterizar el sello de las escrituras poco sagradas de Pérez Reverte, se urde esta película cuyo avance (trailer, para entendernos) sugería algunos detalles bizarros y "de época" que son la tentación corriente y algo irremediable de este porfiado espectador.
Y.
La cosa es que el ambiente sobrecogedor de la selva, las penalidades de los turbulentos conquistadores/aventureros y así sucesivamente, son tema jugoso y, como en esta ocasión, desperdiciable. De modo que se cuenta con algo de truculencia un enredo de conspiraciones, traiciones y recíprocos asesinatos, muy discutiblemente justificables por el honor, la disciplina y otros matices, de camino que se está a la busca de una ciudad hipotética o legendaria que rebosa riquezas y la expedición, como si no tuviese bastante con el acostumbrado ataque de los indignados indígenas, irritadísimos por lo que experimentan como imperdonable invasión, se defenestra a sí misma en una sin par arrebatiña de poder y crueldades, degüellos, estocadas y otras contundentes lindezas hasta topar, los dos únicos supervivientes de tal epopeya fanática y patética, con la realidad de que no, que no había oro, sino cerámica vidriada y brillante, y de esa manera la hazaña termina como el rosario de la aurora.
Tal que una banda de considerables energúmenos y visionarios toscos queda la mayor parte de los personajes, y el 70% del tiempo, el relato atropellado y las voces pedregosas y de turbia dicción (o el sonido cutre o lo que sea) más bien echan a perder el resto de esta cinta un poco ambiciosa y otro poco decepcionante. 

jueves, 23 de noviembre de 2017

Ya os avisé ayer

Ahora espero que avance la mañana
para dar el paseo preceptivo.
(Era el martini "rojo relativo"
como aquella canción italïana;
otras veces, sangría, "margaritas"
o "gin-tonic" con almendritas fritas.
Puede que esto te suene:
visitas a Granada con Irene.)

En fin, el tiempo pasa. Las edades
se van llevando antiguas amistades.
No llueve casi nunca; el sol, altivo,
desciende sobre guiris y nativos
que, en poca cantidad, estas semanas
deambulan en breves caravanas.
La brisa es fresca, el mar viene rizado
de espumas blancas que buscan la arena
y azul añade al azul de un cielo
-- estelas de verbena
que surcándolo trazan los reactores --
mientras hay en la orilla pescadores
que parecen hieráticos actores
lanzando con paciencia sus anzuelos.

-- Tú lo que estás es muy desocupado.
-- O absorto, inocuo y contemplativo.
-- "Pa" amarrarte, vaya.
-- Es una forma de verlo. 

miércoles, 22 de noviembre de 2017

Prolegómenos y protocolos

No por llevar la contra y parecer
que ejerzo una protesta de calado
(ahora que ya está, y nos han dejado
sin la agencia de los medicamentos,
por mor de las matracas y los cuentos)
salgo a la esquina, hasta el contenedor,
ataviado con mi bata blanca:
si en Salamanca fuera profesor
o un inventor en un laboratorio
que, a trancas y barrancas,
diseñase bruñidos armamentos,
no fuera tan notorio
el aspecto enigmático de actor
que luzco acaso, en este momento.

Los residuos que llevo y deposito
con distante cautela y aprensión
son los restos fugaces y marchitos,
el colofón contrito
de toda gastronómica afición.
Y luego, con germánica entereza
decido sacudirme la pereza: 
pongo una lavadora; tiro el agua
del cubo que incorpora la fregona.
Superado el verano una vez más,
recojo el toldo del porche de atrás,
para tener más luz en la cocina...
...rimas domésticas, como de rutina,
que os dejo. Proseguiré mañana
con otra extemporánea pavana.

martes, 21 de noviembre de 2017

La oportunista desbandada de los "valientes"

Inspirados en el cobarde y fullero ejemplo de vuestro embustero y fugitivo cabecilla, ya os vemos las mañas reculadoras que os servirán para que "el Estado represor", como os gusta decir a los calumniosos, no os ponga las peras al cuarto tanto como seguramente os merecéis.
Lo curioso del caso es que la chapuza de vuestro fingido "arrepentimiento", de vuestros presuntos acatamientos de última hora a esas leyes que con insolente soberbia fueron repetidos objetos de vuestra transgresión, posiblemente no tendrá mayor efecto en la actitud de los tercos e hipnotizados que os secundan.
Y que esa misma miseria, esa escandalosa falta de coherencia y de gallardía servirán quizá de moneda, aunque falsa, para pagar en parte la imperdonable deuda que deja vuestra gestión ruinosa y malintencionada y que, no muy bajo cuerda, ya estáis tratando de reeditar, hatajo de sinvergüenzas, mientras los papagayos/ametralladora (que apenas respiran en las tertulias para imponerse con el parloteo paranoico, defensor de lo indefendible) sólo aumentan con ello vuestro descrédito y la evidencia clamorosa de vuestras mentiras y de vuestra delincuente sinrazón.

lunes, 20 de noviembre de 2017

En la sala de espera

En esta era de los teléfonos móviles, el hombre había optado porque la señal acústica del suyo fuera un fragmento del Himno Nacional, de cuya musical hermosura siempre fue un fervoroso admirador.
Y cuando sonó brevemente en la sala de espera del hospital al que acudía para una intervención quirúrgica, un ceporro, avinagrado de gesto y obtuso de intenciones, inició una especie de protesta renegada, acorde con los sarampiones centrífugos vigentes.
El hombre, mirándolo con distante sosiego, lo interrumpió:
-- Su impertinencia es intolerable: ni hemos sido presentados ni yo lo he autorizado a dirigirme la palabra. En consecuencia, su descortés intento de interpelación está destinado al fracaso.
El tunante de los malos modales quedó alli, rumiando la indigestión impotente de su abortado atrevimiento.
El hombre, que ya tiene una edad, no simpatiza con según qué expresiones de la zafiedad y de la mala educación.

domingo, 19 de noviembre de 2017

Indicaciones del manual de "mantenimientis" (fragmento)

... convendrá en todo caso, y para el mejor deslizamiento de nuestras vidas, tener a la vista (delante, enfrente o bien al lado) la vela blanca de un balandro o de alguna otra embarcación elegante y ligera, que nos haga sentir cierta gozosa serenidad, una suerte de admirado y alegre y moderado principio de risa, mientras evocamos en el porche el talento con el cual este cocido, que aquí ya se ha nombrado anteriormente con merecidos elogios, redondea el mundo y nuestras personales hechuras y vuelve este mes de noviembre, sembrado de soles y gentes casi invisibles por el paseo marítimo, un tiempo de delicia, de lecturas reposadas, de silencio en espera, hasta el nuevo retorno del torbellino que antaño calificáramos con previsora palabra y que, entre lealtades y exigencias, suele celebrar estas redacciones dispersas del Hipocampo, de forma que éste, cada cierto tiempo, concluye y expresa su convencida y proverbial manifestación "eres muy simpática", indirecta y pudorosa envoltura de un cariño que desborda con mucho los límites encantadores de unas caderas, etc.
(También pueden Vuesas Mercedes lucir sobre un chaquetón de color azul marino la insignia correspondiente, la condecoración circular en terso metal, disponible "on line".)
-- ¿Y a ti te parece que te entendemos?
--  Digo yo que una parte, al menos. ¿No? 

sábado, 18 de noviembre de 2017

Enemistades ominosas

Desde el primer momento supe que entre nosotros sólo podría darse una (cuando menos, larvada) enemistad, como los hechos demostrarían pronto.
No me gustó su mirada desafiante, y el carácter mutuo de la desconfianza quedó patente cuando intentó escapar, a pesar de lo reducido del espacio y de su condición tersa y pulida que iba a hacer más difícil todavía cualquier amago de camuflaje.
Por mi parte, no contribuía a mi tranquilidad su casi frenética carrera ni tampoco que su cuerpo fuese de tamaño menor que el de una lenteja. Así que pasé a la acción de inmediato, con la intrépida determinación que suele templar el ánimo de los más avezados aventureros y exploradores de cualquier selva amazónica que se precie y, emulando a los antidisturbios y sus mangueras a presión, abrí a tope el grifo, cuyo decidido caudal ha debido llevarse (por los laberintos infinitos y kafkianos de las alcantarillas) el inundado cadáver de la araña que sorprendí en el fregadero, a mi regreso a casa, después de unos días de viaje.
Ahora, los latidos de mi alterado pulso van estabilizándose, con la conciencia del deber cumplido y del restablecimiento del orden democrático en las instituciones...  

viernes, 17 de noviembre de 2017

La vuelta a las rimas

La transitoria desaparición
de las palabras que combino a solas
no se debe ni al viento ni a las olas,
ni a un fatal paro de este corazón.
Y aunque el colesterol
prosigue su empeñoso y firme asedio
no son ese camino ni esos predios
los que entorpecen de este BLOG la acción.
Solamente propongo en mi descargo
que tenga en cuenta el paciente lector
el sabor nada amargo
de estos versos filtrados al desvelo
del sueño de una nueva madrugada
de cariños como de terciopelo.

Después de Astorga y las mantecadas,
los chorizos picantes y, de Alonso,
ese reconfortante chocolate
(digna liturgia de dignos abates,
sosegados después de los responsos),
continúo otra vez con la tarea
de las rimas que traigan las mareas.

El Hipocampo.

martes, 7 de noviembre de 2017

Convendrá tenerlo presente

Contemplo todo esto que ya, alguna vez, hemos nombrado aquí.
-- Sí, sí, para poner los dientes largos: que si el mar, que si el jardín, que si las puestas de sol...
-- Precisamente. Pero hoy, con el "taller" de costura que han montado en el porche las manos laboriosas que me hacen el café...
-- A "Isadora" te refieres.
-- Justo. Pues que mirando el ficus frondoso de la esquina y el limpio cielo del día, y el cristal emplomado e inocente del balandro, el faro y el acantilado...
-- Eso, tú sigue.
-- No me interrumpas. Que lo que me da pena es saber que nuestro tiempo, el de todos, tiene la duración limitada y siempre será poco, ahora que algunas cosas ya aprendimos (no digo que todas, claro) para vivir, sentir, querer mejor.
-- Pues aprovecha a tope, esa modesta sabiduría.
-- Tienes razón. Convendrá tenerlo presente.  

lunes, 6 de noviembre de 2017

Forajidos por el mundo

No sé con qué delito de los tuyos
hará la vista gorda el juez flamenco:
¿se dejará influir del verbo tuyo
y de esos cuatro que forman tu elenco?

Aquí ya conocemos
tu desleal retórica falsaria
y habrá de ser muy mucho más que memo
si con tu estrafalaria luminaria
te hace caso del rollo macabeo,
de la matraca revolucionaria
de esa república zurda y temeraria
(que parece sacada del TBO)
y el mojigato son de tus plegarias.

Contemplamos por la televisión
tu hipócrita sonrisa, al desayuno;
tus paseos de "mártir" moribundo
que traza los segundos,
los días, las semanas de pasión,
de cobardes manejos oportunos.

Pero por tu horizonte se dibuja
la acreditada factura pendiente
de una celda con barras, "presidente"
que acogerá tu rostro de granuja.

sábado, 4 de noviembre de 2017

Pañitos calientes

Llama la atención esa tendencia a la queja, vaya.
Cuando tamaña "causa" tiene como valedores a tantos y tan aguerridos paladines, a semejantes "héroes" del idealismo, de la "democracia" a su manera, y cuando tanto ímpetu afanador se ha empleado en barrer para adentro y en defenderse entre todos, siempre que ese "todos" solamente incluya a "los nuestros"...
...quizá rechina, decepciona, disuade, el talante que decía el otro resbaladizo tramposo, con el cual se pide, se pretende que, al aplicar las sanciones que creyeron que jamás los alcanzarían, intangibles en su "diferencia", ellas sean de talla tal que no rebasen esa "proporcionalidad" que arbitrariamente querrían, del más cómodo diseño y de la conveniencia más sesgada y ventajista.
A lo mejor les gustaría que se les tratase con pañitos calientes; o que la máxima sanción consistiera en la obligación de comer a diario helados de postre, con lo que eso duele a las dentaduras no tan feroces en realidad de los "honorables" y su decadente séquito, su tropilla rencorosa y revoltosa de seguidores. 

viernes, 3 de noviembre de 2017

Tarde de lluvia

Finalmente, llueve, bendición en la que coincidirán conmigo hasta nuestros más infames díscolos.
Y estamos tan desacostumbrados que resulta un espectáculo, dichoso y liberador. Que nos deja un atardecer espléndido de contrastes, de nubes fantásticas con ribetes de luz rosa, oro, salmón, mientras el sol cae, como cada año por noviembre, enfrente de esta casa, en los rumbos lejanos y seductores de Costa Rica, de Panamá, de la gloriosa Cartagena ultramarina.
Es como un homenaje (así quiero imaginármelo, con vanidoso y caprichoso antojo) a la fecha que se aproxima y que acaso celebraremos con discreto júbilo privado, insistiendo en aquello de una edad tan seria como la mía, con el permiso de la Autoridad y el permiso de conducir que hay que renovar casualmente en el centro/diana de la efeméride.
En el "entremientras", mi Isadora personal tiene el detalle (y no es el único) de prepararme el café de la sobremesa, a cuya creciente afición sin duda me acercan las siete décadas que ya, ya mismo, volverán a marcarse en el calendario del Hipocampo.
Salud. 

jueves, 2 de noviembre de 2017

Grandes Hoteles: Soto del Real y otros

Vivimos tiempos miserables, cautelosos en extremo, apocados: políticamente CORRECTOS!! Y una......  como una olla, claro.
Así que decimos "presunto", con un escandaloso eufemismo, a cualquier delincuente, en espera de que la sentencia firme, hasta el último recurso posible, siente que el delito está probado y el culpable, hallado sin género de dudas.
Esto, el coladero que tiene, es que la "tele", los videos y los telefonitos testigos/chismosos/chivatos denuncian con tan innegable evidencia los hechos que lo de "presunto" suena a burla, salvo en la teoría protocolaria, garantista y, desde luego, legal/acatable de los tribunales de Justicia.
Conque si, además de saltarse la Ley un montón de veces, se pasean sonrientes, saludando como triunfales estrellas de cine, y son aclamados por sus fans, en una recalcitrante exhibición de chulería y recochineo...
... la juez Lamela obra más que bien poniendo a buen recaudo a esta reata de políticos nefastos que 1º construyen a capricho un conflicto perverso; 2º, exigen una solución; 3º, elevan el chantaje al cubo y finalmente se salen por los cerros de Úbeda a base de victimismo, mentiras y repúblicas independientes de pacotilla.