domingo, 14 de diciembre de 2014

Pastora Soler: un compás de espera



Los remos más bonitos de la canción popular de nuestro mapa y días, se abaten, se rinden, se niegan a continuar, por ahora, la travesía exigentísima que has impuesto a la barca.
Afirman que la artista que eres ha devorado a la mujer que, también o previamente, eres.
La música, que no está exenta de incorporar la seducción peligrosa del áspid, se puede llevar por delante a sus oficiantes de muy variadas maneras. Pero el Hipocampo cree que, por fortuna, no será tu caso; y que, superado este inconveniente tránsito, reanudarás con tu paso firme y brillante una cadencia a la que quedan muy valiosos logros por sembrar.    

1 comentario:

  1. Feo comentario el de "el Sabina" ("ma dao un Pastora Soler"). Feo como su música y como él.

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